El Gobierno mexicano anunció hoy que realizará una contribución voluntaria extraordinaria a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) en atención al llamado que hizo el organismo meses atrás cuando informó que atravesaba por una crisis financiera.
“Hace unos meses realizamos una contribución voluntaria extraordinaria a la Corte (Interamericana de Derechos Humanos) y en ese mismo tenor me complace anunciar una contribución voluntaria extraordinaria a la Comisión, atendiendo al llamado urgente hecho recientemente a todos los Estados miembros”, dijo la titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores, Claudia Ruiz Massieu.
Ruiz Massieu, quien inauguró en la Ciudad de México el seminario “Derecho Nacional e Internacional. Desafíos Compartidos”, remarcó que “México es y seguirá siendo uno de los aliados más activos y comprometidos del sistema interamericano de derechos humanos”.
Recordó que su país es el principal contribuyente de América Latina al presupuesto regular y voluntario del sistema interamericano de derechos humanos y el tercero a nivel continental.
También destacó que ante la Organización de Estados Americanos (OEA) ha reiterado la necesidad de “fortalecer financieramente los órganos del sistema y diseñar un nuevo esquema de financiamiento sostenible” para que dichos órganos no dependan de situaciones coyunturales y desempeñen de manera efectiva su mandato.
La canciller consideró que el sistema interamericano de derechos humanos vive “un momento determinante de renovación”.
Días atrás, la CIDH urgió el apoyo de los Estados del hemisferio para encontrar una solución permanente a la falta de fondos y superar así la crisis financiera que ha afectado la institución este año, al tiempo que el presidente de la Comisión, James Cavallaro, abogó por un mayor compromiso de los Estados para solucionarla.
En mayo pasado la plana mayor de la CIDH y sus trabajadores, en una movilización sin precedentes, pidieron a los 34 Estados miembros de la OEA que asuman su responsabilidad con la defensa de los derechos humanos y corrijan la anomalía de los últimos años, en los que el organismo ha sobrevivido gracias a los fondos voluntarios de países europeos