RÍO DE JANEIRO. El Senado brasileño inició hoy la sesión final del juicio político a Dilma Rousseff y en un plazo aproximado de dos horas los 81 senadores deben votar si inhabilitan definitivamente a la presidenta apartada o si archivan la denuncia y permiten su vuelta al poder.
La mayoría de analistas, la prensa y miembros de los partidos de centroderecha dan como seguro que Rousseff, reelecta en octubre de 2014 con 54.5 millones de votos, perderá hoy su mandato, ya que más de dos tercios de la cámara alta se pronunciará a favor del “impeachment”.
La votación se celebrará en torno a las 13:00 horas locales y se produce tres meses y medio después de que Rousseff fuera suspendida de sus funciones por el mismo Senado, y siete días después de maratónicas sesiones parlamentarias como la del lunes, cuando Rousseff se defendió en persona durante 14 horas ante los senadores.
De confirmarse su inhabilitación, el presidente en ejercicio, Michel Temer, vicemandatario de Rousseff desde 2011, asumirá el mando en Brasil hasta los comicios generales de 2018.
Temer, acusado por Rousseff de ser un “usurpador” y “golpista”, tiene previsto realizar un pronunciamiento a la nación hoy y viajar a China para participar en la Cumbre del Grupo de los 20 este fin de semana en la ciudad de Hangzhou (este).
dec