Hoy se presenta el IV Informe de Gobierno por parte del presidente Enrique Peña Nieto, y el problema de la inseguridad será un tema que tendrá que abordar desde varios rubros, pues los índices delictivos han aumentado de manera considerable.
De hecho, el martes pasado, durante la 40 Sesión del Consejo Nacional de Seguridad Pública, el Presidente adelantó que existe un repunte en los delitos de alto impacto entre los que destacó el homicidio doloso.
Dentro de su presentación fueron dos datos los que alertaron a las organizaciones de la sociedad civil encargadas de analizar el fenómeno de la seguridad en México; el primero de ellos fue que Peña Nieto refirió que el “repunte” de los delitos de alto impacto se ha presentado durante los primeros siete meses de este año, en relación con el mismo periodo de 2015. Pero las cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública señalan que el aumento tiene al menos 16 meses.
Pero fue otro dato el que llamó la atención de los invitados y los distrajo al grado de pedir información sobre lo expresado por el primer mandatario. Quien informó que dio indicaciones al gabinete de seguridad para que “en estrecha coordinación con las autoridades locales, se ponga en marcha una estrategia de atención integral a los 50 municipios que concentran 42% de los homicidios dolosos que hoy se están cometiendo en el país”. Y remató señalando que esos 50 municipios representan sólo 2% del país, es decir, que 42% de los homicidios dolosos sólo ocurren en estas regiones.
De manera inmediata, las organizaciones civiles solicitaron al Secretariado Ejecutivo la lista de estos 50 municipios que son considerados por el Presidente como los más peligrosos del país, pero la lista no fue entregada ni tampoco la metodología que se usó.
Sacando las cifras por números absolutos y no de manera proporcional de enero a julio de este año, el Observatorio Nacional Ciudadano obtuvo que los municipios con mayor número de homicidios dolosos son, en primer lugar, Acapulco con 554, seguido por Tijuana con 460, Culiacán con 222 y Ciudad Juárez con 210.
En esta lista hecha a partir de los datos del secretariado aparecen también, en los primeros lugares, los municipios de Ecatepec con 168, Monterrey con 135, Ciudad Victoria con 130, Chilpancingo con 125, Iztapalapa con 121 y Manzanillo con 115.
Destaca que en lo que va del año se han abierto 11 mil 257 averiguaciones previas por homicidio doloso, y en esos 50 municipios se han perpetrado cuatro mil 980.
El gran problema de haber tomado la cifra absoluta de los homicidios es que el gobierno no realizó un comparativo proporcional, en donde tomara como base las tasas de homicidios por cada 100 mil habitantes.
Ahí se hubieran percatado que Colima es el estado con mayor tasa de homicidios, pues mensualmente se cometen casi 46 al mes; lo mismo ocurre con Guerrero, en donde la tasa es de 36 mensualmente y Sinaloa, lugar en que hay 20 asesinatos al mes. El gran problema del uso de la metodología y los datos en materia de seguridad es que al emplear la parte proporcional en las cifras se puede tener mejores resultados en el envío de fondos especiales al combate a la inseguridad.