Estados Unidos y China anunciaron hoy la ratificación del acuerdo alcanzado el pasado 12 de diciembre en la conferencia internacional de París para luchar contra el cambio climático.
Horas antes, China había anunciado que el Parlamento aprobó el borrador del tratado “para ratificarlo”, en el acto de cierre de la sesión bimensual del Comité Permanente del Congreso Nacional Popular.
El presidente Barack Obama presentó ante el secretario general de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Ban Ki-moon, un documento en el que acepta que Estados Unidos ratificará el Acuerdo de París.
El presidente de China, Xi Jinping, también presentó su documento de ratificación del acuerdo sobre la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero ante el secretario general de la ONU.
“Creo que el acuerdo de París llegará a ser un punto crucial para nuestro planeta, creo que la historia juzgará los esfuerzos de hoy como esenciales”, dijo Obama en presencia de Xi y Ban.
Obama, quien llegó a la ciudad de Hangzhou, capital de la oriental provincia de Zhejiang, para participar en la Cumbre del Grupo de los 20 (G-20), dijo que el anuncio conjunto demuestra que las dos economías más grandes del mundo son capaces de unirse para luchar contra el cambio climático.
Si el Acuerdo de París entra en vigor este año como se espera casi 200 países se verán obligados a cumplir la promesa de reducir las emisiones.
Por su parte, el mandatario chino aseguró que el cambio climático concierne al bienestar y el futuro de la humanidad.
La entrega del documento legal es un nuevo y solemne compromiso del gobierno chino, manifestó, reportó la agencia china de noticias Xinhua.
Con el depósito conjunto de los documentos, China y Estados Unidos han demostrado su ambición y determinación de enfrentarse juntos al desafío global, comentó Xi.
China es el principal emisor de CO2, mientras que el segundo es Estados Unidos, y la participación de los dos países aumentará significativamente la posibilidad de que el acuerdo entre en vigor.
El Acuerdo de París, que fue adoptado en la conferencia de la ONU sobre el clima del año pasado, tiene el fin de sustituir al Protocolo de Kioto de 1997.
El acuerdo entra en vigor si por lo menos 55 países lo ratifican, y la cantidad total de sus emisiones de gases de efecto invernadero representa 55 por ciento o más del total mundial.
“El hecho de que los dos mayores emisores (de gases contaminantes) hayan dado este paso juntos y lo hayan dado pronto debería dar confianza a la comunidad internacional”, dijo el asesor presidencial de Estados Unidos en la materia, Brian Deese.