El arzobispo primado de México, Norberto Rivera Carrera, dijo que los gobiernos están obligados a cuidar los derechos y dignidad de los migrantes, lo cual significa eliminar muros en las fronteras para que las personas transiten con libertad.
“Los tratados internacionales deben de perfeccionarse, pero nunca con represiones ni muros, ni mucho menos con muertes de aquellos que buscan la sobrevivencia con valentía y dignidad en favor de su familia”, dijo el sacerdote católico durante su homilía de la misa de mediodía en la Catedral metropolitana.
Rivera Carrera indicó que la defensa de los derechos de los migrantes recae en los gobiernos, los cuales regulan los flujos humanos, esto con respeto a las personas, las necesidades de las familias y las exigencias de la sociedad que acogen a los inmigrantes.