La autoridad meteorológica de China activó hoy la alerta amarilla por el tifón Malakas, que se prevé golpeé las costas en el suroeste del país, a sólo 48 horas de que otro huracán sacudió con fuerza a las mismas regiones chinas.
Malakas, el tifón 16 de la temporada 2016, fue detectado a 135 kilómetros de la costa oriental de Taiwan acompañado de vientos de hasta 50 metros por segundo en su avance hacia el noroeste.
El meteoro entrará por el mar Oriental de China este sábado por la noche, indicó el Centro Meteorológico Nacional (CMN).
De acuerdo con el pronóstico, fuertes lluvias caerán entre hoy y mañana en partes de las provincias de Zhejiang y Fujian en la parte continental de China, así como en las partes central y norteña de Taiwan.
El fenómeno natural se presenta después del paso del tifón Meranti, que ha dejado al menos 14 personas muertas y otras 14 desaparecidas en las regiones surorientales de China desde que tocara tierra en Fujian el jueves por la mañana.
China tiene un sistema de alerta por colores de cuatro niveles para el tiempo adverso en el que el rojo es el más grave, seguido por el naranja, el amarillo y el azul.
Meranti, considerado el fenómeno natural de su tipo más fuerte este año a escala mundial, llegó a Xiamen (provincia oriental de Fujian, frente a la costa occidental de la isla de Taiwán) la madrugada del jueves, ocasionando serios estragos a su paso por esa demarcación.
Siete personas murieron en Fujian debido al tifón; seis fallecieron en la vecina Zhejiang y otra perdió la vida en Taiwán, por donde pasó el Meranti con vientos de más de 200 kilómetros por hora.
Según los gobiernos locales, 14 residentes continúan desaparecidos en este territorio y se reportan más de 50 heridos en Taiwán.
Más de 331 mil personas tuvieron que ser realojadas en Fujian, departamento en el que se calculan pérdidas económicas directas de mil 700 millones de yuanes (249 millones de dólares).
Según el Centro Meteorológico Nacional, el tifón se debilitó a depresión tropical horas después de tocar tierra y moverse hacia el norte, llevando lluvias torrenciales a las provincias de Fujian, Zhejiang, Jiangxi, Jiangsu, Anhui y la ciudad de Shanghai.
Zhejiang, donde se registran seis muertos y cinco desaparecidos, encara además unos 70 mil habitantes realojados, y se prevé que las pérdidas económicas asciendan a los mil 800 millones de yuanes (unos 260 millones de dólares).