El Gobierno de Enrique Peña Nieto vive una dicotomía.

 

El Presidente de México ha ido a la Organización de las Naciones Unidas (ONU) a abogar por los migrantes y pedir un trato humanitario, como lo reclaman muchos luchadores sociales.

 

Magnífico.

 

Simultáneamente se da un problema a punto de llegar a crisis humanitaria.

 

Me reporta un amigo:

 

“Cientos de migrantes procedentes de países africanos se aglomeran en las ciudades fronterizas de Baja California.

 

“Procedentes de lugares tan remotos como el Congo, Uganda o Angola, han llegado hasta la frontera de México con Estados Unidos con el propósito de hacer suyo el sueño americano, solicitando asilo político por razones de gobierno o religiosos.

 

“Han ingresado a nuestro país cruzando por la frontera sur y otros por vía aérea al aeropuerto de la Ciudad de México. En ambas situaciones cruzaron el resto del territorio nacional hasta alcanzar la frontera.

 

“Al llegar buscaron la garita migratoria norteamericana y declararon su solicitud de asilo, y fueron rechazados. Y aquí están: en plazas públicas y centros asistenciales, viviendo de la caridad pública ante una autoridad mexicana absorta, superada e inoperante”.

 

SON MILES Y SUMARÁN MUCHOS MÁS

 

Hay muchos datos sueltos.

 

Porque la historia es la siguiente:

 

Un día llegaron unos cuantos africanos, vía México, a las puertas de Estados Unidos a pedir asilo americano.

 

Se los dieron.

 

Agradecidos, llamaron a hermanos, padres, otros familiares y amigos.

 

-Vénganse. Aquí está el futuro y la gloria.

 

Y llegaron más.

Hoy, son dos mil, y vienen más.

 

Pronto sumarán muchos más, porque están porosos por la corrupción del cuerpo diplomático, cuyos cónsules entregan visas; y la frontera sur y el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM), donde los miembros del Instituto Nacional de Migración (INM) dejan pasar sin control.

 

Mi amigo remata con preguntas:

 

“¿Será esto un nuevo problema o situación de conflicto para la autoridad mexicana?

 

“¿Terminará deportando a estas personas a sus lugares de origen?

 

“¿Les dará un estatus humanitario?

 

“¿Se convertirán estos migrantes en delincuentes?”.

 

Los bajacalifornianos ironizan con puntadas:

 

-Nacionalícenlos y denles tenis para que corran y hagan ganar a México muchas medallas.

 

Nada que ver con los discursos en la ONU.

 

ASILO HUMANITARIO O HABRÁ CRISIS

 

  1. Una duda más:

 

A falta de vida, ¿qué harán esos africanos cuando el hambre los desespere?

 

Porque a Estados Unidos ya no van.

 

Corren apuestas.

 

  1. El Estado de México se calienta.

 

Doble contra sencillo: Josefina Vázquez Mota será candidata panista-perredista si Alejandro Encinas no rompe la alianza.

 

Y por el PRI se agitan las aguas.

 

Hoy el principal impulsado es Alfredo del Mazo, seguido de cerca por Ana Lilia Herrera y Carlos Iriarte, pero en la contienda están Ernesto Nemer, Carolina Monroy, José Manzur, y anote usted a quien quiera, pero son muchos los aspirantes.

 

Una acotación: en esa lista están los preferidos de Enrique Peña y de Eruviel Ávila, lo cual da un principio de acuerdo.