WASHINGTON. Estados Unidos tiene un plan para mantener el control del bastión del Estado Islámico (EI) en Siria una vez ejecutada la ofensiva para tomar la ciudad, afirmó el general Joseph Dunford, jefe del Estado Mayor Conjunto.
En una audiencia en el Senado, Dunford dijo que están preparando a 14 mil fuerzas árabes aliadas de Washington para mantener el control de Raqa, aunque no dio detalles de como EU, que se niega a intervenir con tropas de combate sobre el terreno en Siria e Irak, podrá controlar la plaza en caos de la guerra civil siria.
“Tenemos un plan pero no tenemos los recursos”, explicó Dunford, quien señaló que esas fuerzas árabes son solo parte del plan para evitar al EI volver a recuperar terreno perdido.
El jefe del Estado Mayor Conjunto aseguró que las fuerzas kurdo-sirias (Fuerza Siria Democrática) serán las que llevarán el peso de la batalla hacia Al Raqa porque son “la fuerza más efectiva que tenemos ahora mismo” sobre el terreno en Siria, pero no tienen la intención “mantener el control en Al Raqa”.
Ante la insistencia de los senadores, el secretario de Defensa, Ash Carter, aseguró que apoyaría el envío de armas a las fuerzas kurdo-sirias para avanzar en el objetivo de retomar Al Raqa.
Turquía, aliado de la OTAN, se opone que a que esas fuerzas kurdas, con vínculos con el Partido de los Trabajadores Kurdos (PKK) turco, salgan de las zonas de influencia a lo largo de su frontera con Siria.
EI será expulsado
El senador republicano John McCain, presidente del Comité de las Fuerzas Armadas de la cámara alta, aseguró que no hay dudas de que tarde o temprano el EI será expulsado de su bastiones de Al Raqa (Siria) y Mosul (Irak), pero eso no significa que se resuelvan los problemas que ha provocado el conflicto sirio.
“(La liberación de Al Raqa y Mosul) será una un éxito táctico, pero es poco probable que desemboque en avances estratégicos porque esta administración ha fallado en hacer frente las causas subyacentes del conflicto, que a veces ha exacerbado”, explicó el veterano senador, que criticó la falta de avances para expulsar del poder a líder sirio, Bachar al Asad.
McCain, quien fue candidato presidencial republicano en 2008, aseguró que los recelos y tensiones sectarias y étnicas persistirán, algo de lo que EI no es más que “un síntoma de un problema más profundo”.
Carter consideró que una vez tomada Al Raqa, en el norte sirio a orillas del río Éufrates, quedarán por resolver “desafíos políticos” que se deben dar tras los avances militares, que tienen como objetivo principal acabar con el EI.