MIAMI. La “costa dorada” de Florida, en el sureste de Estados Unidos fue puesta bajo alerta ante el inminente arribo del poderoso huracán Matthew, mientras el meteoro atraviesa lentamente el mar Caribe y golpea con toda su fuerza Haití y el oriente de Cuba.

 

El gobernador de Carolina del Norte, el republicano Pat McCrory, declaró el estado de emergencia en 66 condados del centro y el este del estado, en el que prevé la evacuación de un millón de personas.

 

En tanto, el gobernador de Florida, Rick Scott, declaró el estado de emergencia, y el alcalde del condado Miami-Dade, Carlos Giménez, dijo en rueda de prensa que aunque no hay planes de evacuación todavía, los residentes deben prepararse para la tormenta con agua, baterías, linternas y alimentos.

 

En otra sesión informativa en Cayo Marathon, el gobernador Scott advirtió a los residentes que viven a lo largo de la costa prepararse para posibles “impactos directos” de la tormenta que puede incluir tornados, fuertes lluvias y la erosión de las playas.

 

 

Debido al huracán, el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, suspendió una visita que tenía programada a Miami el miércoles para apoyar la candidatura de la candidata demócrata Hillary Clinton.

 

María Torres, experta del Servicio Nacional de Meteorología en Miami, dijo a Notimex que el huracán estará alcanzado a Cuba este día en la tarde y noche; luego estará sobre las Islas de las Bahamas el miércoles y se comenzarán a sentir sus vientos en el sur de Florida la noche del miércoles y jueves.

 

Torres señaló que actualmente Matthew es un huracán categoría 4 en la escala Saffir-Simpson de 5 niveles con vientos máximos de 230 kilómetros por hora.

 

Residentes de Miami-Dade, el condado más poblado de Florida de mayoría latina, salieron el martes a centros comerciales para comprar baterías, agua, gasolina y generadores para hacer frente a la tormenta.

 

Lina Valderrama, una inmigrante colombiana, relató que adquirió un generador de electricidad, gasolina, agua, y linternas en prevención.

 

“El gobernador dijo que los condados estaban en emergencia y antes de que pase algo peor hay que estar preparados”, mencionó Valderrama entrevistada por Notimex en una tienda en el suroeste de la ciudad.

 

Otros condados del sur de Florida como Broward, Palm Beach y Monroe, los más poblados del estado, también se encontraban bajo alerta debido a que Matthew es considerado un poderoso huracán que no se veía en el Caribe desde Félix en 2007.

 

Mientras Florida se preparaba para recibir los efectos de Matthew, vientos lluvias devastadoras del fenómeno seguían azotando Haití, dejando una estela de destrucción.

 

El ojo del poderoso huracán cruzó el suroeste de Haití este martes para convertirse en el primer gran huracán que golpea la isla de La Española en 50 años.

 

Se esperaban grandes inundaciones y deslizamientos de tierra peligrosos en toda la isla, donde más de 55 mil persona siguen viviendo en tiendas de campaña tras el terremoto de 2010 que mató a más de 200 mil personas.

 

dec