PARÍS.- La canciller mexicana Claudia Ruiz Massieu y la ministra francesa de Cultura, Audrey Azoulay, encabezaron esta noche aquí la inauguración en el histórico Grand Palais de París de la exposición de obras maestras de arte mexicano del Siglo XX más importante jamás expuesta en la “Ciudad Luz”.
Acompañadas de personalidades del mundo de la cultura, la política y la diplomacia de los dos países, Ruiz Massieu y Azoulay inauguraron la exposición titulada “México 1900-1950 Diego Rivera, Frida Kahlo, José Clemente Orozco y las vanguardias”, compuesta por 203 obras maestras de artistas mexicanos.
La muestra incluye sobre todo cuadros, casi el 60 por ciento del total, pero también esculturas y fotografías, realizadas por 64 artistas mexicanos entre los que figuran Diego Rivera, Frida Kahlo, Siqueiros, Orozco, el fotógrafo Manuel Álvarez Bravo, así como otros artistas menos conocidos del gran público.
Se exhibe en dos plantas del edificio histórico construido para la Exposición Universal de 1900 de París, y está considerada como la más importante del arte mexicano expuesta en París desde 1953, y la mayor de pintura de artistas de México exhibida en la “Ciudad Luz” en toda la historia.
“Es un honor estar entre ustedes en el Grand Palais, un espacio que brilla en esta ciudad deslumbrante y que acoge hoy la mayor exposición de arte mexicano en Francia desde hace seis décadas”, declaró en francés, en un discurso inaugural, la canciller mexicana Claudia Ruiz Massieu.
“La relación entre México y Francia trae hoy esta muestra tan importante del arte de México de la primera mitad del siglo XX para invitar al pueblo francés a revisitarnos y a volvernos a descubrir”, comentó posteriormente a la prensa la secretaria de Relaciones Exteriores sobre la muestra.
“Según dice una placa, éste es un monumento consagrado a la gloria del arte francés, pero me alegro mucho de que fiel a su vocación este Grand Palais sea también durante algunos meses un monumento a la gloria del arte mexicano”, comentó de su lado la ministra francesa de Cultura, Audrey Azoulay.
Azoulay subrayó que “los franceses aman a los artistas mexicanos. Esta muestra es la más ambiciosa de arte mexicano y tiene cuadros en principio imprestables”, comentó por su parte la directora del Grand Palais, Sylvie Hubac.
En el evento también intervino la directora general del Instituto Nacional de Bellas Artes, María Cristina García Cepeda, quien “celebró” que “Francia y México puedan seguir acercándose más” a través de la exposición, que aspira a atraer al menos a 120 mil espectadores, y que esta noche ya generó una larga fila de visitantes.
También asistió el embajador de México en Francia, Juan Manuel Gómez Robledo, el excanciller mexicano y copresidente del consejo estratégico franco-mexicano, Jorge Castañeda, y la actriz y cantante francesa -muy vinculada a México- Arielle Dombasle, “madrina” de la muestra.
Con un recorrido organizado no de manera temática, no cronológica, la muestra exhibe algunos de los cuadros más simbólicos del periodo 1900-50 como “Las dos Fridas”, de Frida Kahlo; “El coronelazo”, de Siqueiros; y “La canoa enflorada” y “Paisaje zapatista”, de Diego Rivera, quien pasó parte de su juventud en París.
“Ésta es la exposición más grande yo creo dedicada a la historia del modernismo de México que se presenta en París, incluso más que la del 1953 y la del 2000, que eran unas visitas panorámicas que cubrían desde los periodos arqueológicas hasta nuestros días” declaró a Notimex el comisario de la exposición, Agustín Arteaga.
“Es una de las exposiciones más importantes sobre arte mexicano de este periodo. Muchas son totalmente inéditas. Las dos Fridas por ejemplo no salían a ninguna muestra desde hace 16 años”, agregó Arteaga, actual director del museo de Arte de Dallas, Estados Unidos.
La muestra, que abrirá sus puertas al público mañana miércoles y permanecerá abierta hasta finales de enero de 2017, se expone en un ala del célebre Grand Palais.
“Es muy importante que en este centro en el que se han presentado las grandes obras maestras de la creación humana acoja las obras maestras de esos grandes genios mexicanos. Es una especie de saldar una asignatura pendiente”, consideró el experto, en referencia al Grand Palais, que acoge la exposición.
La exposición fue organizada por el Grand Palais de París, la Secretaría de Cultura de México, el Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA) y el Museo Nacional de Arte de México (MUNAL).
Contiene piezas prestadas de más de 20 museos de México y del mundo y de fundaciones, y más de 30 colecciones privadas de América, Europa y Latinoamérica, y una docena de museos internacionales desde el Metropolitan, el Moma de Nueva York, la Tate de Londres o el Reina Sofía en Madrid, entre otros.
“La Exposición está compuesta de obras maestras y sí es muy difícil tenerlas juntas. Son grandes esfuerzos de muchas instituciones para apoyar esta exposición”, resaltó el comisario de la muestra.
“Es verdaderamente una exposición dedicada a establecer una nueva narrativa sobre el arte mexicano y tratar de quitar esos clichés de que todo ocurre exclusivamente con la revolución y de que sólo existe un arte que tiene que ver con lo político y lo social”, subrayó Agustín Arteaga.
La muestra está dividida en cuatro secciones centradas en la modernidad, la Revolución mexicana, artistas y opciones ideológicas, y “encuentro entre dos mundos: la hibridación” que acoge el ala derecha del Grand Palais en cuyas vidrieras se han impresionado imágenes de Diego Rivera, de Orozco y de Siqueiros.
Entre otros temas, la exposición se subdivide en apartados como “los mexicanos en París”, “las mujeres fuertes”, “México y los Estados Unidos” y “el surrealismo” en México.
También se muestran videos como fragmentos de “Viva México” de Eisenstein, y una instalación de tres grandes pantallas con extractos de algunas películas mexicanas, desde películas de la época de oro como “Enamorada”, a otras más recientes como “Amores perros”.
dc