Le pregunté a varios panistas por qué no salían a defender a Josefina Vázquez Mota.
Lo primero que me llamó la atención fue que ella, como persona, no les preocupaba gran cosa. Diríase que su ex candidata presidencial no es precisamente muy estimada entre la tropa blanquiazul.
“No es alguien que se haya ganado nuestro cariño”, describió un panista de larga data.
Luego vinieron respuestas de otro tipo, más en relación con el reportaje que presentó Mexicanos contra la Corrupción y la Impunidad bajo la firma de Salvador Camarena y Dulce González (¡hitazo!, compañeros), como ésta:
-¡Pero si ella misma no se defiende! Si uno quiere que lo defiendan, primero debe decir algo. Mientras ella no explique su situación, nadie va a salir en su defensa.
O esta otra, cargada de sarcasmo:
-¿Qué vas a decir? ¿Qué su rol de niña buena y de las causas nobles se le vino abajo porque los priistas son unos malditos y la embaucaron obsequiándole 900 millones de pesos para que los repartiera a su gusto?
Y ésta, con mayor enojo:
-Si alguien desnuda con pruebas a otro, ¿qué haces? ¿Te pones a gritar que no es cierto, que lleva puesto un vestido de noche? ¡La desenmascararon!, punto.
En cuanto a quién o quiénes estarían detrás de la “filtración” de lo que recibe Juntos Podemos por parte del gobierno de Enrique Peña Nieto–para los panistas hay una mano que mece la cuna-, no tienen muchas dudas.
Calculan que el “golpe” podría venir en contubernio del propio gobierno –sea de Pinos, Gobernación, o incluso del propio gobernador mexiquense, Eruviel Ávila– y el cacique panista, Ulises Ramírez, quien controlaba el partido blanquiazul en el Edomex desde 2006 y fue desplazado hace un par de meses por Victor Hugo Sondon, con apoyo de Ricardo Anaya, para tratar de abrirle el camino a Josefina para la candidatura del Edomex.
Venga de donde venga el tiro, lo que algunos panistas piensan es que si ya de por sí se veía difícil que Vázquez Mota aceptara la candidatura del PAN para la gubernatura del Estado de México –“porque no es una persona que arriesgue nada”-, ahora mucho menos.
Eso, por lo que toca al lado de Acción Nacional.
En cuanto a los priistas, pues sí, hay muchos que están felices. Sobre todo los mexiquenses, pues con esto –además de relamerse con la jugada de ver a Josefina cooptada por Peña– ven mayores posibilidades de triunfo para el PRI en las elecciones del próximo año en su entidad.
Más sin embargo, tampoco crean que todos quedaron muy contentos con esta historia del dinero entregado por el gobierno federal a la panista para que ella se pare el cuello con los migrantes mexicanos en Estados Unidos.
Miembros del servicio exterior están poco menos que furibundos. Más, en los consulados mexicanos en la Unión Americana, porque a ellos sí que les restringen el dinero para ayudar a los connacionales, y ahora resulta que lo que a ellos les niegan, se lo dan por fuera a una señora que ni al gobierno de México pertenece.
Chulada de historia, pues.
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GEMAS: Obsequio de José Newman Valenzuela en recuerdo de Luis González de Alba: “Luis traía la brisa de la desventura en sus ojos tristes y su voz ahogada. Con los años siempre asocié su presencia y destino con Fredy Mercury. Libertario, buscador, atrevido, audaz, brillante, lúcido, talentoso, sentidor, tierno y valiente! Adios Luis, ahora más, 2 de octubre no se olvida!”