El cáncer de mama en México aumentó 20% en los últimos cuatro años, período en el que también incrementó la incidencia en mujeres consideradas “jóvenes” (menores de 40 años de edad).
De acuerdo con Patricia Villareal, ginecóloga oncóloga del Instituto Nacional de Cancerología (INCAN), los casos diagnosticados en el país pasaron de 15 mil, en 2012, a 18 mil en 2015, lo que representa un incremento de 20%.
Además, las muertes asociadas a dicha enfermedad, en el mismo periodo, pasaron de cuatro mil 200 a cinco mil 800, es decir, un aumento de 38.1%.
En lo que respecta a las jóvenes, el número de casos nuevos se incrementó alrededor de 11% en 2015, informó la especialista a 24 HORAS.
“Cabe destacar que estos canceres de mama en mujeres jóvenes tienden a tener un comportamiento más agresivo que en una mujer mayor y obviamente su diagnóstico es peor”, informó la especialista.
Villareal destacó que, respecto al mundo, el país se encuentra en un grupo intermedio en relación al promedio total de mujeres diagnosticadas con tumores en el seno.
“Lo importante de México es que, lamentablemente, se comienza a detectar (el cáncer de mama) en fases avanzadas, es decir cerca del 70% de los canceres en México son detectados en esas fases”, agregó la oncóloga.
El cáncer de mama puede originarse por diferentes factores de riesgo, como ser mujer, presentar mutaciones genéticas y tener una vida sedentaria; sin embargo, hay mujeres que desarrollan la enfermedad pese a que están libres de dichas circunstancias.
Además, apuntó que para prevenir este tipo de cáncer es necesario contemplar tres medidas de detección, que consisten en la autoexploración, el examen clínico de las mamas y la mastografía.
“La detección temprana todavía tiene muchas carencias en nuestro país (…) se calcula que menos de 30% de las mujeres se hacen autoexploración o se realizan una mastografía”, puntualizó Villareal.
Del total de casos diagnosticados, entre 25 y 30% se detectan en etapas tempranas (1 y 2) y cerca de 70% en fase avanzada (conocida como 2b y 3), es decir que necesitan cirugía, quimioterapia, radioterapia u hormonoterapia.
El cáncer de mama también puede presentarse en hombres a cualquier edad, pero se detecta comúnmente en varones de 60 a 70 años; no obstante, la cifra de afectados se ha mantenido estable y representa menos del 1% con relación al cáncer de mama en mujeres.
Cáncer cervicouterino
Por otra parte, México es el país con la mortalidad más alta por cáncer cervicouterino (de útero) entre los países de la OCDE, por lo que es considerada la segunda causa de muerte de mujeres.
Según la Asociación Mexicana de Lucha contra el Cáncer, 30.8% de los casos son detectados etapas tardías y 16.6% en etapas intermedias; es decir al año se detectan 13 mil casos nuevos a pesar de ser altamente prevenible.
No entendía porque me estaba pasando esto
Hace tres años, a Yolanda Vergara le resultó extraño sentir una bolita en su seno. Al notar ese cambio en su mama, recurrió por primera vez a realizarse un chequeo, pues nunca se había preocupado por hacerse una autoexploración y, mucho menos, una mastografía.
A sus 48 años, al acudir al médico le dijeron que era un problema de grasa, por lo que le recetaron tomar desinflamatorios y le recomendaron no comer cacahuates, papas fritas o chocolates.
Pasaron un par de días, pero Yolanda continuaba intrigada y preocupada, pues algo en su mente le decía que eso no era “normal”, así que recurrió a hacerse una mastografía y un ultrasonido con el objetivo de sacarse todas las dudas posibles.
Al entregarle los resultados, el especialista le comentó que su situación era una cuestión muy delicada y que tenía que buscar un hospital.
“A mí me comentaron que la gente obesa y que fuma padece esto, pero la verdad es que yo no soy obesa, no fumo ni tomo y no entendía porque me estaba pasando esto”, aseguró a 24 HORAS.
Al visitar el Seguro Social le diagnosticaron cáncer avanzado (fase 2), cuyo factor, según los especialistas se debió a una cuestión hormonal, a pesar de que en su familia nadie ha padecido esta enfermedad.
“Yo no sentía dolor ni nada y de verdad juraba que no tenía nada de eso, ya cuando me dicen que es cáncer pues para mí fue algo fatal y dije ‘yo no voy a poder pasar esto’. Pero gracias a dios aquí estoy”, agregó Vergara.
Tratamiento
Después de un mes fue sometida a cirugía y luego inició un tratamiento de radioterapia y quimioterapia.
Vergara aconseja a todas las mujeres que se realicen sus autoexploraciones y se atiendan periódicamente, puesto no es algo que se deba dejar a la deriva.
“Cada vez que platico con personas que conocieron mi caso, yo les recomiendo que no se descuiden. Sé que siempre que nos hablan de un oncólogo pensamos lo peor del mundo, pero de verdad las van a sacar de dudas. Entonces llámese bueno o malo es bien importante recurrir a esos médicos”, concluyó.