El secretario de Finanzas de la Ciudad de México, Edgar Amador Zamora, expuso a diputados federales que el recorte presupuestal propuesto por el Gobierno Federal para lograr un superávit primario de 0.4% y mantener así la credibilidad de los mercados financieros, implica una reducción de 10 mil 565 millones de pesos para la capital y la obligaría eventualmente a aumentar su déficit público.

 

Durante una mesa de trabajo con la Comisión de la Ciudad de México de la Cámara de Diputados, Amador Zamora detalló que, si bien la propuesta del paquete económico para 2017 significa una pérdida de recursos de las entidades federativas por 52 mil 200 millones de pesos, el recorte propuesto para la ciudad es muy sensible, porque implicaría 20.2% del ajuste total en los estados.

 

El funcionario explicó que el gobierno capitalino entiende la preocupación del Gobierno federal de cuidar su credibilidad en los mercados financieros, pero lo que “no comprendemos es el peso que se le pone a la ciudad”.

 

Advirtió a los diputados federales que sin recursos para los proyectos de la Línea 12 y 9 del Metro se va a provocar que la estación Observatorio “colapse” y, en consecuencia, el Tren México-Toluca no funcionaría como está planeado.

 

 

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“Para nosotros la importancia del Tren de Toluca es muy alta, porque proveería una conexión muy valiosa, pero si dejamos una brecha abierta en la estación de Observatorio, dejando la Línea 12 y 9, sería incompleta y no vamos a darle el servicio de movilidad masiva al Aeropuerto internacional”, explicó durante su exposición inicial.

 

Deuda pública

 

Recordó que el techo de endeudamiento neto del Gobierno de la Ciudad de México para 2017 será de cuatro mil 500 millones de pesos, es decir, el mismo monto autorizado para el presente ejercicio fiscal.

 

Amador Zamora adelantó que, si en el 2017 no se otorgan recursos por Fondo de Capitalidad, entonces la CDMX se verá obligada a colocar (pedir prestado) el monto total de la deuda autorizada, lo que representaría un crecimiento de 2.29% de su déficit.

 

Aseguró que la deuda de la entidad “se encuentra en márgenes manejables” y sólo representa el 13.7%  de la deuda total del país. Incluso, resaltó la calificación positiva de las calificadoras internacionales, pues la mitad de la deuda está a tasa fija.

 

De hecho, aseguró que con 61% de sus ingresos propios, la ciudad podría pagar el total de la deuda, al contrario de otras entidades. Además, señaló que la capacidad de pago de la ciudad ha mejorado en los últimos 20 años.

 

“Hemos tratado de cuidar el nombre crediticio de la ciudad. Seguimos siendo la entidad mejor calificada del país respecto a las otras entidades”, subrayó.