WASHINGTON. El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, elogió hoy el acuerdo alcanzado para limitar el uso de gases de efecto invernadero más potentes que el dióxido de carbono, en un gran esfuerzo de la lucha contra el cambio climático.

 

En un comunicado, el mandatario calificó el nuevo acuerdo como “ambicioso y una solución de largo plazo para esta crisis que se avecina”.

 

Las conversaciones sobre los hidrofluorocarbonos (HFC) son calificados como la primera prueba de la voluntad global desde que se alcanzó el histórico Acuerdo de París para reducir las emisiones de carbono del año pasado.

 

Los HFC, descritos como los contaminante de más rápido crecimiento del mundo, se utilizan en acondicionadores de aire y refrigeradores, y según expertos, frenar su uso es la manera más rápida para reducir el calentamiento global.

 

El acuerdo que incluye a representantes de 200 países, anunciado este sábado por el ministro ruandés de Recursos Naturales, Vincent Biruta, modifica el Protocolo firmado en 1987 para preservar la capa de ozono y podría evitar un calentamiento de 0.5 grados durante este siglo.

 

El convenio, a diferencia de la versión más amplia de París, es legalmente vinculante.

 

Fija un límite máximo y reduce el uso de HFC en un proceso gradual comenzando en 2019 con la acción de los países desarrollados, entre ellos Estados Unidos, el segundo peor contaminador del mundo después de China.

 

“Este gas de efecto invernadero muy contaminante (HFC) puede ser cientos de miles de veces más potente que el dióxido de carbono, y representa una amenaza creciente para la salud de nuestro planeta”, señaló el mandatario estadounidense.

 

“Esto demuestra que podemos tomar medidas para proteger nuestro planeta de una manera que ayude a todos los países a mejorar las vidas y medios de vida de sus ciudadanos”, concluyó Obama.