BERLÍN. La Agencia Espacial Europea (ESA) reconoció hoy en un comunicado que el módulo de aterrizaje espacial Schiaparelli se estrelló contra Marte al llegar a la superficie a una velocidad mucho mayor de lo previsto.
“Se estima que Schiaparelli cayó desde una altura de entre dos y cuatro kilómetros (de altura), con lo que impactó a una velocidad considerable, a más de 300 kilómetros por hora”, explica la nota de la agencia.
La ESA añade que sus científicos creen que el módulo, que tenía por misión explorar la superficie del planeta rojo y era una importante apuesta de la aeronáutica europea, tuvo “una caída libre mucho mayor de lo planeado”.
Especulan los expertos con que “los propulsores” del Schiaparelli, que debían frenar su caída al actuar en sentido contrario a la gravedad de Marte, “se apagaron de forma prematura”.
La agencia explica que ha podido finalmente desentrañar lo sucedido al módulo, con el que no lograba contactar desde la operación de aterrizaje este miércoles, gracias a las imágenes de la cámara CTX de baja resolución a bordo del satélite MRO de la agencia estadounidense NASA que orbita en torno a Marte.
En la zona del impacto, prosigue la nota, se pueden ver en la última de las imágenes dos novedades con respecto a fotografías previas de ese punto.
Los expertos creen que una de ellas, la brillante, es el paracaídas del módulo, mientras que la segunda es una “borrosa zona oscura” de 15 por 40 metros que los científicos relacionan con el fuerte impacto del aparato.
Esta zona oscura podría ser producto del fuerte impacto contra el planeta, que lanzó a la atmósfera una nube de material de la superficie, explicó la ESA.
Los científicos de la agencia europea siguen mientras tanto recopilando más información para asegurarse de que esto fue lo que realmente sucedido con el módulo.
A la vez, siguen trabajando en el análisis de todos los datos que envió el Schiaparelli durante su descenso hasta la superficie del planeta rojo.