El Gobierno federal destinó como partida adicional poco más de ocho millones de pesos, a través de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol), para 11 albergues de Baja California, que desde mayo atienden a migrantes haitianos y africanos que están a la espera de que Estados Unidos les otorgue el Estatus de Protección Temporal (TPS por sus siglas en inglés).
Guillermo Peñúñuri Yépiz, delegado de la Sedesol en esa entidad, dijo que el 25 de octubre se entregaron dos millones 190 mil pesos en productos de primera necesidad, para 30 días, a los albergues designados.
Y agregó que el viernes pasado se asignó un recurso de dos millones de pesos más para impermeabilizar y fumigar estos lugares. “Y viene un fondo de cuatro millones de pesos por parte del Instituto Nacional de Desarrollo Social (Indesol)”.
En una entrevista con 24 HORAS el funcionario comentó que este fondo se destinará al pago de agua, luz, gas y teléfonos, “para que las organizaciones no gubernamentales que están haciéndose cargo de estos sitios no tengan ese pendiente”.
Abundó que en Tijuana hay alrededor de dos mil 990 migrantes y en Mexicali mil 600, aproximadamente, por lo que la cifra se ha mantenido. “También hay un desplazamiento a la frontera de Nogales y San Luis Río Colorado”.
El funcionario estatal remarcó que el titular de la Sedesol, Luis Enrique Miranda Nava, también dio instrucciones de no descuidar la atención que se les ha dado a los connacionales que llegan de Michoacán, Guerrero, Chiapas y Oaxaca, así como a los mexicanos que regresan de Estados Unidos por la frontera, “estamos hablando de alrededor de 52 mil deportados en de lo que va del año, que hemos recibido en la entidad”, consideró el delegado.
El delegado de la Sedesol indicó que hay algunos centros de migrantes que tienen capacidad para 600 personas. “Estamos hablando de 25 albergues, algunos no lo eran pero se acondicionaron para efecto de atención”.
Rechazo de asilo disminuirá migración haitiana: académico
La reducción de expedición de visas humanitarias por parte de Estados Unidos hará que en el mediano plazo disminuya la llegada de haitianos y africanos a territorio nacional, pronosticó José María Ramos, investigador del Departamento de Estudios de Administración Pública del Colegio de la Frontera Norte.
“(La reducción de permisos de migración legal) va a implicar un escenario donde, en la medida que se generen redes de información, en el sentido de que no es posible cruzar hacia Estados Unidos de manera legal, y porque se sabe que los riesgos de cruzar de manera indocumentada son altos, desincentive la migración”, dijo el académico.
Según datos de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), de mayo, cuando inició el éxodo haitiano, a la fecha, las citas consulares para solicitar el asilo humanitario pasaron de 60 a 40 diarias, lo que ha provocado que se queden varados en Mexicali y Tijuana cinco mil caribeños.
Aunado a ello, dijo Ramos, no todos los haitianos que solicitan la visa humanitaria cumplen con los requisitos de las autoridades migratorias de Estados Unidos, lo cual los colocará en una situación complicada. / Alejandro Suárez