A sólo unas horas del triunfo de Donald Trump en las elecciones presidenciales de Estados Unidos, Ford, el segundo mayor fabricante de vehículos del país vecino, buscó limar asperezas tras el diferendo que mantuvieron por varios meses.

 

En escueto comunicado, la empresa con sede en Detroit respondió al mensaje pronunciado por el magnate apenas se confirmó su triunfo. “Estamos de acuerdo con el señor Trump en que es realmente importante unir al país y esperamos trabajar juntos para apoyar el crecimiento económico y el empleo”, comentó Christin Baker, portavoz de la automotriz.

 

Antes y durante su campaña, el republicano se lanzó contra la empresa por invertir en México y la amenazó al señalar que de llegar a la Presidencia de EU no permitiría a Ford abrir la planta que planea instalar en San Luis Potosí, además de establecer mayores impuestos sobre los vehículos.

 

“Estas ridículas transacciones, aniquiladoras de empleos, no sucederán cuando sea Presidente”, sentenció Trump en referencias a las inversiones anunciadas en territorio mexicano.

 

Recientemente, el ejecutivo de la armadora, Mark Fields, declaró que como multinacional, Ford continuaría invirtiendo para mantenerse competitiva. “Haremos lo que tenga sentido como negocio”, sentenció.

 

 

Capital En México

1,600 mdd, al menos, suman las inversiones de Ford en San Luis Potosí