Donald Trump lanzó su portal gretagain.gov, donde utiliza su eslogan de campaña “Make America great again” (“Hagamos a Estados Unidos grande de nuevo”) por primera vez con la terminación .gov, que identifica a los sitios gubernamentales de Estados Unidos.

 

Allí se anticipa un “programa de diez puntos” con el que el presidente que asumirá el próximo 20 de enero buscará “restaurar la integridad de nuestro sistema de inmigración, proteger nuestras comunidades y priorizar a Estados Unidos”.

 

El punto número 1 de ese plan es “construir un muro en la frontera sur”.

 

Los otros nueve son:

 

2- Terminar con la política de detención y liberación.

3- Tolerancia cero con los delincuentes extranjeros.

4- Bloquear el financiamiento para las “ciudades santuarios” (una referencia a las que mantienen políticas de tolerancia hacia los inmigrantes indocumentados).

5- Cancelar los decretos inconstitucionales (en referencia al de Barack Obama que prorrogó las deportaciones y otorgó permisos de trabajo por tres años a unos 5 millones de indocumentados) y hacer cumplir todas las leyes de inmigración.

6- Suspender el otorgamiento de visas a cualquier lugar donde no pueda se pueda realizar un chequeo adecuado.

7- Asegurar que otros países se encarguen de repatriar a sus ciudadanos cuando sean deportados.

8-Completar el sistema biométrico de visas para las entradas y salidas del país.

9- Terminar con el imán de empleos y beneficios.

10- Reformar la inmigración legal para que sirva a los mejores intereses de Estados Unidos y sus trabajos.

 

La web del equipo de transición también recupera el tramo de un discurso del 31 de agosto del entonces candidato presidencial que hace referencia a qué ocurrirá con los más de 11 millones de inmigrantes indocumentos que viven hoy en Estados Unidos.

 

La victoria del candidato republicano echó por tierra un montón de certezas y trajo consigo otras tantas preguntas, de cuyas respuestas dependerá el futuro inmediato y de mediano plazo en todo el planeta.

 

No hay antecedentes para contrastar: por primera vez en la historia, este país eligió para ocupar la Casa Blanca a una persona que no había pasado antes por ningún otro escalafón de la carrera política o en las Fuerzas Armadas.

 

En los próximos días, a medida que dé entrevistas y nuevos discursos, y se vaya conociendo cómo acomodará las piezas de su gabinete, comenzará a avisorarse el contorno real de lo que será su mandato. Más adelante, su primera gira como presidente electo puede dar una pista de cuáles serán sus prioridades en política internacional, un tema en el que tuvo posiciones oscilantes durante la campaña. La respuesta, calmada, de los mercados locales, a su elección, también puede interpretarse como una prenda de paz de Wall Street hacia el candidato. Por ahora, la respuesta de Trump, como la mayor parte de su futuro inmediato, sigue siendo un misterio.