Ante la compleja situación de los migrantes haitianos y africanos que van rumbo a Estados Unidos, una solución es que México presione para agilizar los trámites de una visa humanitaria para ellos, pues antes la cita tardaba cuatro días y ahora es de 40 o más, señaló Roberto Herrera Carassou, académico de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM.

 

“Las autoridades nuestras pueden, a pesar de la promesa y del ambiente que existe en Estados Unidos, tan proclive a las deportaciones, buscar la manera de que se agilice el trámite”, comentó el académico durante la conferencia El riesgo de una crisis humanitaria: refugiados haitianos en el norte de México.

 

Según cifras de la Comisión Nacional de Derechos Humanos, actualmente hay cinco mil personas haitianas o africanas a la espera de una cita con las autoridades migratorias estadounidense, la cual se va a prolongar más de un mes.

 

Herrera Carassou añadió que parte de este retraso en las citas es porque cuando comenzó la oleada de migrantes (esto en mayo), en ciudades como Tijuana había 65 citas diarias, y ahora se redujeron hasta 10, lo cual genera una especie de “tapón”.

 

¿País de tránsito?

 

Por su parte, Jorge Alberto Tenorio Terrones, también académico de la Facultad de Ciencias Políticas, comentó otro reto: las deportaciones. Si bien en meses anteriores estaban pasando con cierta facilidad, ahora ya hay casos donde por mentir en sus entrevistas, a haitianos y africanos se les quita la visa humanitaria y por lo tanto son deportados.

 

Pero para tenorio Terrones esto no significa una tragedia, sino debe ser vista como una oportunidad: la de integrar a estas personas a la comunidad mexicana.

 

“Los migrantes continúan su camino con la meta de llegar a Estados Unidos, pero no les disgustaría quedarse en México. Por ello, habría que preguntarnos si somos sólo un país de tránsito”, aseveró el académico.

 

Tanto Herrera como tenorio coincidieron en que pese a que la mayor parte de los migrantes tienen una preparación académica baja, hay un grupo con alta capacitación que puede aportar sus conocimientos a nuestro país, como en su momento ocurrió con los exiliados españoles.

 

Pero eso sí, sería un gran error y hasta discriminatorio sólo aceptar a la gente preparada. Por eso las autoridades deben de comenzar a desarrollar programas de recepción de estos migrantes con la idea de que se queden, lo cual incluya trabajo y servicios sociales.

 

Frase

 

“(Los haitianos y africanos) están aquí por una cuestión de supervivencia, porque necesitan un trabajo que no tienen”

 

Roberto Herrera Carassou

Académico de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM.