BERLÍN. El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, llegó a la capital de Alemania para realizar su última visita al país europeo y a su estrecha aliada, la canciller Angela Merkel, antes de ceder su cargo al republicano Donald Trump, quien se opone a políticas impulsadas por ambos líderes.

 

“No se volverá a un mundo anterior a la globalización”, aseguraron ambos mandatarios en un texto difundido por el semanario Wirtschaftwoche, luego de que Trump se pasara buena parte de su campaña acusando a la globalización del retroceso económico y político global estadunidense.

 

Los dos líderes abogaron por que sus países aprovechen la ocasión para modelar la globalización según sus valores e ideas comunes y se mostraron convencidos de la necesidad de reforzar su cooperación por el bien de sus empresas, sus ciudadanos y de toda la comunidad internacional.

 

Destacaron así el valor del acuerdo de libre comercio e inversiones que negocian Estados Unidos y la Unión Europea (UE) desde 2013, conocido como TTIP por sus siglas en inglés y que ha quedado en suspenso tras las elecciones estadounidenses.

 

“Con el convencimiento común de que el comercio y las inversiones mejoran los niveles de vida, estamos comprometidos con el importante proyecto de crear una alianza transatlántica de comercio e inversiones”, recalcaron en el artículo.

 

Ante la amenaza del cambio climático, destacan el “papel central” que ha tenido la alianza entre EU y Alemania a la hora de impulsar y consensuar el acuerdo de París, que ofrece al mundo el marco necesario para proteger el planeta. Agencias