La expectación por el primer Monday Night Football en México llegó a tal grado que todavía faltaban cuatro horas para el arranque del partido y todos los accesos al Estadio Azteca se encontraban abarrotados y coloridos con toda la afición de los Texans y Raiders.
“Hoy ganamos los Raiders por 15 de diferencia… ¡Arriba Raiders!”, gritó Luis, un fiel aficionado a los malosos.
Más de 90% de las personas que estaban en las diversas explanadas del inmueble vestían los colores negro y plata: desde jerseys, gorras, maquillaje, tacos, mochilas y atuendos bastante estrafalarios, dignos de una de las aficiones más prendidas de toda la Liga.
Fue un gran acierto de la NFL traer a los Raiders a la Ciudad de México, pues toda la afición mexicana cumplió y llegó puntual a la cita para disfrutar el partido con mayor expectativa en nuestro país.
Boleto en mano, ilusiones en la bolsa y muchos suvenires fueron los ingredientes que acompañaron a todos los fanáticos, que sin importar que no jugara su equipo abarrotaron el Coloso de Santa Úrsula.
Por cada aficionado de los Texans, se podía ver más de 50 de Raiders. Ayer por la noche dominaron las barbas, las bufandas y hasta máscaras de auténticos malosos, todos en negro. No cabe duda que la afición al futbol americano en México es mucha y el partido fue todo un exitoso en términos de organización y logística.