La tecnología avanza rápidamente y cientos de gadgets desaparecen facilmente y esta vez podría ser el caso de los palos de selfies, y es que los drones para selfies han llegado con fuerza a todo el mundo.
ROAM-e es un ejemplo de esta curiosa mezcla entre dron y cámara de fotos. Puede seguirnos mientras nos movemos y dispone de tecnología de reconocimiento facial.
Se trata de un pequeño drone de apenas 8.5 centímetros equipado con sistema de doble rotor con palas abatibles, lo que lo hace que se pueda transportar de forma sencilla, en su interior encontramos una cámara con sensor CMOS de 5 megapíxeles, y un un procesador ARM Quad-Core Cortex A7 dedicado exclusivamente para controlar el vuelo.
Cuanta con sistema de carga rápida que logra cargar la batería en sólo dos horas, su autonomía es de apenas 20 minutos, pero la batería es intercambiable, por lo que podemos llevar un par para situaciones de emergencia.
Sin embargo, también tienen puntos débiles. Para empezar por su prohibitivo precio, que se cuenta en miles de pesos, (349 dólares) pero también por su batería, que todavía no va más allá de permitir unos pocos minutos de planeo.
