A través de un comunicado, el Vaticano dio a conocer que el Papa Francisco y el realizador estadunidense Martin Scorsese tuvieron una reunión privada, luego de una proyección especial de la más reciente película de este último, titulada Silence, que trata acerca de varios misioneros jesuitas en Japón durante el siglo XVII.
Esta reunión se da casi tres décadas después de que Scorsese hubiera sido condenado por la Iglesia Católica debido a su película La última tentación de Cristo. El filme se estrenará en Estados Unidos en diciembre, y según allegados al evento el Papa se mostró complacido con el filme debido a que él fue sacerdote jesuita durante su juventud.