La Asamblea Nacional de Corea del Sur aprobó hoy la moción del enjuiciamiento político contra la presidenta Park Geun-hye por su presunta conexión con el escándalo de tráfico de influencias que involucra a su amiga cercana Choi Soon-sil.
Los poderes del presidente de Corea del Sur han sido suspendidos hasta que el Tribunal Constitucional anuncie su decisión.
El primer ministro Hwang Kyo-ahn se convertiría en presidente en funciones, otorgándosele el control sobre los asuntos militares, diplomáticos y administrativos.
La moción fue aprobada con 234 votos a favor de 300 escaños del Parlamento, cumpliendo con el requisito de al menos 200 votos.
El Tribunal Constitucional revisará la legitimidad de la moción, en una deliberación que puede tomar hasta 180 días. El tribunal tardó 63 días en rechazar la moción del juicio político contra el difunto expresidente, Roh Moo-hyun, en 2004.
Con las próximas elecciones presidenciales previstas en principio para diciembre de 2017, la destitución de Park provocaría una reprogramación del calendario electoral, reportó la agencia surcoreana de noticias Yonhap.
El enjuiciamiento político fue propuesto por los tres partidos de la oposición del país, afirmando que Park quebrantó la Constitución y otras regulaciones respecto al escándalo de tráfico de influencias de su amiga Choi Soon-sil.
Choi es sospechosa de ejercer influencia en los asuntos de Estado y disfrutar de beneficios ilegales.
Park dijo anteriormente que esperará a la revisión constitucional si el enjuiciamiento político es aprobado, descartando la posibilidad de dimitir voluntariamente.
La oposición y los legisladores independientes, que ocupan 172 escaños en el parlamento, lograron obtener 62 votos del partido gobernante Saenuri, para llevar la moción al Tribunal Constitucional.
Park se enfrenta a la mayor crisis de su carrera política en medio de las alegaciones de que su amiga Choi ejerció considerable influencia sobre los asuntos estatales y recibió beneficios ilícitos, sin tener cargos oficiales en la administración.
Si la Corte Constitucional respalda la decisión del parlamento, Park, la hija del líder legendario Park Chung Hee, se convertirá en el primer líder democráticamente electo en este país que es destituido antes del final de su mandato.
Las próximas elecciones presidenciales se celebrarán en un plazo de 60 días.
La última encuesta realizada por Gallup Corea muestra un empate entre los dos candidatos más potenciales a remplazar a Park: el jefe de las Naciones Unidas, Ban Ki Moon, y el líder de la oposición, Moon Jae In.