Comprar o contratar servicios, abrir cuentas bancarias y solicitar préstamos sin autorización son algunas de las actividades que los cibercriminales pueden realizar tras obtener los datos financieros de una persona.

 

Asimismo, tienen la posibilidad de venderlos en el mercado negro o la dark web y en el peor de los casos, pueden cometer algún delito capaz de ensuciar la reputación de su víctima sin que ésta lo sepa, advirtió la empresa Norton.

 

Lo anterior tras dar a conocer el Informe Norton sobre Ciberseguridad 2016, en el que detalla que los cibercriminales planean ataques más sofisticados y redituables como el robo de identidad, junto con la falsificación de sitios web o correos electrónicos, también conocido como phishing.

 

Por ello, la empresa recomienda que los usuarios comprueben con frecuencia sus cuentas bancarias, permanezcan alerta ante cargos y correspondencia inesperada, y que nunca proporcionen su información personal en sitios web o correos electrónicos de dudosa procedencia.

 

De acuerdo con el informe de Norton, el phishing es uno de los riesgos cibernéticos de mayor crecimiento, el cual facilita el robo de identidad, ya que por lo menos tres de cada 10 usuarios no saben identificar este tipo de delito.

 

Además, solo cerca de 13 por ciento sabe la diferencia entre un correo legítimo y uno falso en su bandeja de entrada y 80 por ciento de las víctimas a nivel global ha enfrentado problemas como la instalación no autorizada de aplicaciones en sus dispositivos, además del uso ilegal de su información financiera.

 

Norton destaca que el robo de identidad es más frecuente pues cerca de cada dos segundos una persona se convierte en víctima de esta actividad ilegal, que implica una recuperación de los daños de al menos seis meses. JMS