Durante una reunión privada con diputados federales, el procurador general de la República, Raúl Cervantes, lamentó que mientras el Poder Judicial de la Federación es “fuerte” y está reconocido a escala mundial, la dependencia a su cargo “está muy debilitada y con muchos señalamientos”, principalmente por el tratamiento de expedientes de personajes políticos.
Y les dijo que para mejorar esta percepción, se necesita inyectar recursos económicos. También les pidió modificar la legislación en materia de extinción de dominio -pasar de una ley federal a una general- y de lavado de dinero.
Sobre la discusión del mando mixto policial, convocó a los legisladores a dialogar los ajustes con las Fuerzas Armadas y los gobernadores.
El recientemente nombrado procurador consideró que se requiere un “esfuerzo nacional”, que incluya una estrategia cultural impulsada desde la SEP para estimular un cambio en el tema de la corrupción.