Washington. La presidenta de la Reserva Federal, Janet Yellen, reconoció que hay una “considerable incertidumbre” por las políticas económicas que implemente Donald Trump y advirtió la importancia de mantener ciertas regulaciones financieras.

 

En su primera reunión tras las elecciones del 8 de noviembre, el Comité de Mercado Abierto (FOMC) del banco central elevó la tasa de fondos federales a un nivel de entre 0.50 y 0.75%, el primer aumento de 2016 y el segundo desde la Gran Recesión.

 

“Todos los participantes del FOMC reconocieron que existe una considerable incertidumbre sobre los cambios posibles de política económica y qué efecto tendrán en la economía”, declaró en rueda de prensa.

 

Yellen dijo que algunos, aunque no todos los participantes de la reunión, tomaron en consideración las declaraciones del presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, sobre su próxima política económica, aunque dijo que no le daría consejos.

 

“Operamos bajo una nube de incertidumbre, por el momento tendremos que esperar a ver qué cambios ocurren y tomarlos en cuenta para nuestro proceso de toma de decisiones cuando tengamos más detalles”, explicó.

 

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Infografía: Xavier Rodríguez

 

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Sin embargo, Yellen decidió salir al paso a las expresiones de Trump y su equipo de transición sobre su decisión de eliminar regulaciones en el sistema financiero de Estados Unidos.

 

La presidenta de la Reserva Federal pidió recordar que Estados Unidos sufrió un “crisis financiera devastadora” que tuvo un impacto enorme en la economía.

 

“La mayoría de los miembros del Congreso y del público salieron de esa experiencia pensando que era importante tomar pasos para tener un sistema financiero más seguro y más fuerte”, aseveró.

 

Al respecto, destacó las medidas para reducir el riesgo de un fracaso en una empresa importante para el sistema financiero, incluidos los requisitos de que cuenten con más capital y liquidez, así como que realicen pruebas de tensión.

 

No obstante, señaló que la Fed apoya cambios como la eliminación de las responsabilidades de cumplimiento para bancos pequeños o la elevación del umbral para que los bancos sean sujetos a mayor supervisión prudencial.