El Frente Nacional por la Familia exige desechar el proyecto de Constitución Política de la Ciudad de México para iniciar un auténtico proceso democrático que dote a la capital del país de un ordenamiento que tome en cuenta el interés de toda la población y, mediante el referéndum, no sea más un escalón en los proyectos políticos rumbo a las elecciones de 2018.
A través de un comunicado de prensa, el Frente Nacional por la Familia se pronuncia por una Constitución que garantice y proteja la vida, el patrimonio de las familias, la posibilidad de educación de nuestros hijos y el desarrollo económico sostenido, justo y generalizado para todos los mexicanos.
“El marco no puede ser peor por la arbitraria propuesta del gobierno de , por la antidemocrática conformación de la Asamblea Constituyente, por la intransitable operación de su funcionamiento y por estar de espaldas a los mexicanos”, señalan .
Piden trabajar por una “Constitución al vapor, hecha sobre las rodillas en la que se pretenda un albazo que aproveche las fiestas de fin de año para colar ‘bolas rápidas’; México ya no está para sabadazos de los políticos.
Acusan que la Constitución es una “evidente estrategia política” que pretende dividir a la izquierda para posicionar a Miguel Mancera como un precandidato presidencial que pueda enfrentar a Andrés Manuel López Obrador e impedir alianzas entre los partidos opositores.
Con ese propósito, pese a estar en funciones, la VII Legislatura de la Asamblea Legislativa electa democráticamente, se creó un órgano con 40 constituyentes impuestos por vía no democrática y 60 elegidos por apenas el 30% del padrón de la Ciudad de México, apenas dos millones de personas que representan el 22% de sus habitantes. Desde ahí resulta irregular la “novedosa fórmula” para la nueva Constitución.
A esto debe agregarse que el proyecto de Constitución que se discute no contempla la figura de referéndum como mecanismo de legitimidad social y, el colmo, incluye en su articulado la prohibición para que durante cinco años no pueda ser modificada, en un acto autoritario.
Además, la Constitución que se discute vulnera derechos humanos fundamentales como el derecho a la vida, los derechos de los niños a ser educados por su padre y madre, atenta contra el patrimonio de las familias al intentar gravar la plusvalía y no reconocer la importancia de la propiedad privada.
Se trata de un proyecto ideologizado que coloca al gobierno como protagonista principal de la economía en un modelo que ha fracasado en el mundo y mantiene hoy al borde del colapso a hermanas naciones sudamericanas.
Y además estamos frente a un proyecto que pretende estar por encima de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos y de las constituciones de los Estados, con lo que se vulnera el pacto federal. Parecería claro el intento de sentar las bases para ensayar un nuevo modelo que pueda establecerse a nivel nacional a propósito del centenario de nuestra Carta Magna.
Es en este contexto que las organizaciones que integran el Frente Nacional por la Familia así como: Juntos por México, Pasos por la Vida, Sociedad Bíblica de México entre otras que coinciden plenamente con los planteamientos que demandan:
1. Desechar el proyecto actual de Constitución que discuten los constituyentes frente al enorme costo político social y económico que implica ya.
2. Que se replantee el proyecto de constitución para dotar a la Ciudad de México una ley general alineada con la Constitución General de la República.
3. Que la ciudadanía elija en 2018 una Asamblea de la Ciudad de México que sea constituyente con integrantes de todos los partidos y en una votación con mayor participación ciudadana.
jram