Ya sin posibilidades de acceder a la postemporada, Philadelphia (5-9) podría convertirse esta noche en una pieza clave para las aspiraciones de uno de sus rivales divisionales antagónicos, los Vaqueros de Dallas (12-2).

 

En caso de vencer a los Gigantes (10-4) durante la penúltima fecha de temporada regular, Philadelphia otorgaría de forma inmediata el título de campeón de la Conferencia Nacional a la franquicia propiedad de Jerry Jones, una hazaña que los de la estrella solitaria no consiguen desde 1995.

 

El panorama luce complicado para los de Pensilvania, ya que el último antecedente entre Gigantes y Águilas es una victoria de los neoyorquinos por 28-23 y, esta campaña, el equipo comandado por Doug Pederson suma cuatro derrotas en cuatro compromisos divisionales.

 

En ofensiva, las diferencias entre Giants e Eagles son abismales; a pesar de que en los controles ofensivos se presenta un enfrentamiento muy parejo en cuanto a yardas, se torna desequilibrado si de touchdowns hablamos: Eli Manning llega con 3491 yardas por aire y 25 pases de anotación, mientras el novato Carson Wentz registra 3385 yardas aéreas y apenas 13 ovoides capturados en las diagonales.

 

Otro factor que podría resultar determinante esta noche son las recepciones por equipo. Durante toda la temporada, Philadelphia no ha encontrado un receptor que garantice yardas. El líder Jordan Matthews tiene 72 recepciones y apenas dos touchdowns, mientras Odell Beckham Jr. saltará al campo con 85 recepciones y 10 anotaciones en su haber. / Redacción