El paro del transporte público en este puerto se prolongó por más de 12 horas y derivó en un enfrentamiento a pedradas entre choferes y policías estatales, la noche de este lunes con un saldo de dos detenidos que luego fueron liberados.
Desde las 7 de la mañana, taxis, camiones y Urvans pararon labores y se manifestaron en diferentes puntos de Zihuatanejo, en protesta por el aumento al precio del combustible.
Hacia las 10 de la noche, los líderes transportistas propusieron a sus agremiados parar la protesta y continuar este martes, pero los inconformes se negaron a retirarse, para continuar con el paro indefinido, por lo que un grupo de los rezagados, que se encontraba frente a la central camionera, detenían a los choferes que sí acataron la orden y a gritos los obligaban a volver al plantón.
Fue en ese momento cuando se dio el primer roce con los estatales, quienes pidieron a los manifestantes que dejaran irse a los demás, lo que provocó que se agarraran a empujones.
Ante la actitud de los transportistas, los policías subieron a sus patrullas y avanzaron sobre los carriles que dirigen hacia Paseo de Zihuatanejo Oriente.
Sin embargo, los inconformes comenzaron a organizarse y subieron a microbuses para trasladarse hasta la colonia Nuevo Amanecer, donde esperaron a los efectivos y se atravesaron en el bulevar para no dejarlos pasar.
Fue ahí donde comenzaron a arrojarse piedras, pero los transportistas corrieron hacia las diferentes calles de la Nuevo Amanecer para dispersarse.
Los policías no subieron a las calles de la Nuevo Amanecer, regresaron al bulevar en donde permanecieron por aproximadamente 30 minutos y detuvieron sólo a dos transportistas, a los cuales sometieron durante el alboroto.
Líderes de las organizaciones de transportistas se encargaron de dialogar con las autoridades para que liberaran a sus agremiados.
jram