Ante los rumores de la posible salida de General Motors o Chrysler de Coahuila, dijo que “eso no va a pasar, pues es muy difícil que estas empresas renuncien a un mercado tan grande como el mexicano”.
“Son cosas que, ante la situación nacional e internacional, la gente lo aprovecha para infundir temor, para generar confusión”, declaró.
Explicó que recientemente en Detroit, el CEO de General Motors dijo que Coahuila no se debe de preocupar, pues no se llevarán la fábrica a Estados Unidos, como días atrás se había especulado.
Consideró que sin duda, “algunas de las acciones que lleve a cabo el presidente electo de los Estados Unidos, Donald Trump, afectarán la economía de nuestro estado, pero no al grado de que se cierren las plantas de General Motors o Chrysler”.
Destacó que una de las razones por las que es muy difícil que cierren estas armadoras, “es que los mexicanos consumimos alrededor de un millón 600 mil vehículos nuevos al año”.
“De hacerlo (llevarse las armadoras a Estados Unidos), las empresas americanas perderían el mercado, lo que sería aprovechado por las marcas japonesas o coreanas”, detalló.
“Somos una economía muy grande, y eso también hay que decirlo”, afirmó Rubén Moreira, dando como ejemplo el anuncio de General Motors, hace pocos días, de pasar una producción de Canadá a México.