Prudente, pese al buen nivel mostrado en el arranque de la temporada, el español Rafael Nadal volvió a entrenarse este miércoles en Melbourne Park con la motivación de firmar un buen papel en el Abierto de Australia, el primer Grand Slam del año.
Ataviado con un pantalón blanco y una camiseta sin mangas de color gris, Rafa Nadal trabajó bajo la supervisión de su tío Toni en una calurosa jornada en Melbourne.
“Cuando llegas a un nuevo torneo debes prestar atención a cada momento, a cada entrenamiento, a cada partido. Todos los rivales son peligrosos. El año pasado me sentía bien, porque había jugado muy bien en Abu Dabi y en Doha. También tuve una buena semana de entrenamientos en Melbourne, pero, después, perdí en primera ronda”, recordó el ganador de 14 títulos de Grand Slam.
“Trabajé realmente duro en Mallorca para poder recuperarme de la lesión (en la muñeca izquierda) y siento que estoy en el camino correcto”, explicó el ex número uno del mundo.