ABUYA. Al menos 50 personas murieron hoy y 120 resultaron heridas por un bombardeo aéreo del Ejército de Nigeria en un campamento de refugiados situado en la localidad de Rann, en el norte del país, informaron a Efe fuentes de Médicos Sin Fronteras (MSF).

 

El Ejército, que no precisó el número de víctimas, confirmó este ataque aéreo ocurrido durante una operación militar contra el grupo terrorista nigeriano Boko Haram que, “desafortunadamente”, ha afectado a civiles y miembros del personal humanitario de MSF y del Comité Internacional de la Cruz Roja (ICRC).

 

“Los equipos de MSF han visto 120 heridos y 50 muertos tras el bombardeo. Ahora están tratando de proporcionar primeros auxilios en sus instalaciones y están estabilizando a los pacientes para poder evacuar a los heridos”, explicaron a Efe fuentes de la organización, cuyos equipos sobre el terreno están “conmocionados” con lo ocurrido.

 

Según explicó el comandante de la operación, Lucky Irabor, en una rueda de prensa en la ciudad de Maiduguri (norte de Nigeria), el ataque militar se inició esta mañana después de haber recibido información de que en la zona se encontraban terroristas de Boko Haram.

 

“Desafortunadamente, el ataque se llevó a cabo pero otros civiles que estaban en los alrededores de la zona se vieron afectados”, aseguró el comandante.

 

El campamento de desplazados internos de Rann se encuentra situado muy cerca de la frontera con Camerún, en el estado norteño de Borno, uno de los objetivos habituales del grupo yihadista Boko Haram.

 

Aunque el Ejército nigeriano confirmó que durante el ataque murieron civiles y afectó al personal de MSF y ICRC, todavía no ha proporcionado ninguna cifra oficial de víctimas mortales.

 

Por su parte, MSF pidió a las autoridades que pongan todas las medidas en marcha para facilitar la evacuación de emergencia de los heridos.

 

“Nuestros equipos médicos y quirúrgicos en Camerún y Chad están listos para tratar a los pacientes heridos”, añadió la organización.

 

Boko Haram ha matado a más de 20.000 personas y ha obligado a más de 2,5 millones a huir de sus hogares desde que empezó su actividad terrorista en 2009.

 

Los yihadistas han sufrido numerosas derrotas desde que Nigeria, Chad, Camerún y Níger decidieran crear una fuerza multinacional para coordinar una ofensiva alrededor del lago Chad, zona fronteriza de los cuatro países.

 

No obstante, en las últimas semanas han vuelto a perpetrar varios ataques en el noreste de Nigeria, donde luchan por instaurar un Estado de corte radical islámico.