Uno de los abogados de Joaquín “El Chapo” Guzmán dijo hoy que “esto sigue” y que seguirán “luchando”, aun cuando el capo ha sido entregado en extradición a las autoridades estadunidenses, pues la defensa del líder del cártel de Sinaloa es como “una carrera de relevos”.

 

“Joaquín está vivo, no está muerto, tenemos que seguir luchando”, dijo a Efe José Refugio Rodríguez poco después de que un avión con Guzmán a bordo despegara desde el aeropuerto de la fronteriza Ciudad Juárez hacia Nueva York.

 

El abogado añadió que “esto es una carrera de relevos, donde la estafeta cambia, y cambia a los abogados de Estados Unidos”.

 

La defensa desconfía de que el Quinto Tribunal Colegiado en Materia Penal en la Ciudad de México negara la protección a Guzmán apenas un día después de que la Suprema Corte de Justicia le devolviera los recursos de amparo.

 

Con esto “se ve claramente un contubernio entre el Gobierno federal con el Poder Judicial federal, y es una lástima”, valoró Rodríguez. “No es una sospecha, es evidente que había algo pactado”, agregó.

 

Pese a que el titular de la Comisión Nacional de Seguridad, Renato Sales, había adelantado hace unos meses que la extradición se concretaría en enero o febrero de 2017, el abogado explicó que, aunque las autoridades pudieran solicitar el traslado del Chapo a EU, “el Poder Judicial es autónomo”.

 

Rodríguez, que en estos momentos se encuentra en Ciudad Juárez, relató que aproximadamente a las 12.00 hora local (18.00 GMT) llegó a la prisión de máxima seguridad en la que se encontraba recluido Guzmán.

 

Sin embargo, no se le permitió hablar con el Chapo y le tuvieron “dos horas encerrado en una área”, por lo que desde allí solo oyó “volar los helicópteros y todo lo que pasó, todo el movimiento”.

 

La extradición “esperemos que sea para bien” pues “aquí lo estaban tratando muy mal”, comentó el abogado, y aseveró que “últimamente” se había dado cuenta de que “lo habían golpeado y estaba lastimado de un hombro”.

 

El Chapo -quien se ha escapado dos veces de prisiones de máxima seguridad, la primera en 2001 y la segunda en 2015- fue recapturado la última vez el 8 de enero de 2016 en su natal estado de Sinaloa.