Miles de personas comenzaron hoy a concentrarse en las calles del centro de Washington para asistir a la denominada “Marcha de las Mujeres“, que se espera que sea una de las manifestaciones más concurridas de la historia de EU.
Los organizadores preveían en un principio la asistencia de unas 250.000 personas, convocadas en defensa de la diversidad, la igualdad y los derechos de las mujeres que ven amenazados con el nuevo presidente de EE.UU., Donald Trump.
Pero ese pronóstico se ha incrementado hasta el medio millón de personas, de acuerdo con los organizadores y las autoridades de la capital.
Según constató Efe, desde primera hora del sábado las estaciones del metro que da servicio a Washington y su área metropolitana estaban abarrotadas de personas que van a acudir a la marcha, que tiene entre sus impulsoras a famosas como Scarlett Johansson, Katy Perry, Julianne Moore o America Ferrera.
También se están produciendo atascos en las vías para acceder a Washington desde las zonas residenciales aledañas de Maryland y Virginia.
La actriz Ferrera, de origen hondureño, fue una de las primeras oradoras del día en el punto inicial de concentración de los manifestantes, cercano al Capitolio.
“El presidente (Trump) no es Estados Unidos. Nosotros somos Estados Unidos y estamos aquí para quedarnos”, proclamó Ferrera.
— Women’s March (@womensmarch) January 21, 2017
Desde allí la marcha partirá a partir de las 13.15 hora local (18.15 GMT) por el National Mall para concluir ante el Monumento a Washington, frente a la parte sur de la Casa Blanca.
Entre los oradores de hoy también figuran las actrices Scarlett Johansson y Ashley Judd, así como el cineasta Michael Moore.
A través de su cuenta de Twitter, la excandidata presidencial demócrata Hillary Clinton, quien perdió las elecciones del pasado noviembre ante Trump, dio las gracias a los manifestantes por, en sus palabras, “hablar y marchar por nuestros valores”.
Según constató Efe, entre los cárteles que llevan los manifestantes puede leerse: “En las mujeres confiamos”, “No puedes pararnos, tenemos a Meryl Streep”, y otro de los mensajes en camisetas es “El futuro es mujer”.
Uno de los emblemas de la marcha son los gorros “pussy cat” (gatito), que se cuentan por miles y son una respuesta al polémico comentario de Trump de que a las mujeres hay que agarrarlas por sus partes íntimas (“pussy”, en inglés).
El movimiento no se limita a Washington, sino que estará arropado por 616 “marchas hermanas” en todo Estados Unidos y en el resto del mundo, con manifestaciones previstas el sábado en ciudades como Buenos Aires, Lima, Bogotá, Madrid, Barcelona y Granada (España), además de la capital de México y otras 16 localidades mexicanas.
La marcha surgió del impulso feminista de un grupo de jóvenes que no podían creer que un candidato, Trump, que había sido acusado de acoso sexual por varias mujeres y pronunciado comentarios denigrantes sobre ese género ganase las elecciones de noviembre pasado.
Pero desde entonces el movimiento ha crecido hasta abarcar un abanico de demandas progresistas, con una plataforma que va desde la igualdad de salario y el derecho a abortar hasta la defensa de los derechos de los inmigrantes, los homosexuales y los musulmanes, unidas a proclamas ecologistas y sindicalistas.