MADRID.- La decisión de retirar la información en español en la web de la Casa Blanca es un gesto “simbólico”, aunque “grave” por sus implicaciones, que hoy han lamentado en España desde los directores de la RAE y el Instituto Cervantes a varios ministros.
La versión en español, idioma que hablan más de 50 millones de personas en Estados Unidos y 700 en todo el mundo, de la web de la Casa Blanca desapareció ayer en internet poco después de que el nuevo presidente del país, Donald Trump, tomara posesión de su cargo.
“Sorry, the page you’re looking for can’t be found (Disculpe, la página que está buscando no se puede encontrar)”, es el mensaje que aparece en la página www.whitehouse.gov/espanol, abierta por la Administración de Barack Obama poco después de llegar al poder.
La medida, aseguró a EFE el director de la Real Academia Española (RAE), Darío Villanueva, cumple “desafortunadamente” las previsiones “más negativas” sobre Trump y es “un retroceso notable” aunque sea “simbólico”, porque no va a frenar el uso del idioma, en un país en la que cada vez es “más firme” la presencia del español.
Villanueva no ve la forma de hacer “una protesta oficial”, pero recalcó que en este asunto “no tiene interés solo el Gobierno español sino el de 22 países más”, es una cuestión “que tiene que ver con la expulsión de las minorías” y que, a pesar de la tradición “lingüicida” de Estados Unidos, el español “resistirá” al empeño de volver al “english only”.
Para el director del Instituto Cervantes, Víctor García de la Concha, se trata de un gesto “simbólico” pero “grave” porque “no presagia cosas buenas”: hay un 18 % de la población que habla español, que subirá en 40 años al 23,4 %, y Trump “rema contra corriente”.
“Nosotros no vamos a pararnos, vamos a continuar, y el Cervantes, del brazo de todos los países iberoamericanos, vamos a volcarnos en Estados Unidos, pero no buscando pelea sino el diálogo”, añadió en declaraciones a Efe.
El portavoz del Gobierno español y ministro de Educación, Cultura y Deporte, Íñigo Méndez de Vigo, indicó en una nota que la decisión “no es una buena noticia”, pero “no detendrá ni pondrá en peligro la difusión imparable” del idioma.
“El conocimiento y uso de diferentes idiomas en una sociedad es algo que sirve para vertebrar a un país y demuestra la riqueza cultural” de una nación, como sucede en España, señaló Méndez de Vigo.
El titular de Asuntos Exteriores, Alfonso Dastis, indicó en Barcelona que, si bien las gestiones sobre la web de la Casa Blanca son “internas” de Estados Unidos, “lamentan” y “no les parece buena idea” la supresión de la versión en español.
El secretario de Estado de Cultura, Fernando Benzo, indicó a EFE que la comunidad hispana en Estados Unidos merece un trato especial en atención a su relevancia en ese país y “todos deberían verse reconocidos” en la nueva Administración.
Danie Ureña, presidente de The Hispanic Council, que promueve las relaciones entre la comunidad hispana de Estados Unidos y España, señaló en una nota que Trump se equivoca, entre otras razones porque “se va contra la cultura” de millones de ciudadanos de ese país.