El costo de los energéticos representa un riesgo para la inflación, pues a medida que se vayan conociendo los nuevos ajustes en las gasolinas y estos se vayan liberando, probablemente se observarán incrementos ante la recuperación en el precio del petróleo y las gasolinas en mercados internacionales.
Gabriel Casillas, economista del Grupo Financiero Banorte, dijo que una presión adicional para el bolsillo del consumidor, en la política para contener el aumento de la inflación es una posible alza en las tasas de interés por parte del Banco de México.
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“Las tasas de interés sufrirán cambios ante el posible incremento que acordará el Banxico, en la reunión de su Junta de Gobierno el próximo 9 de febrero, modificación que permitiría aminorar la depreciación del peso en el tipo de cambio frente al dólar y las expectativas al alza de los precios al consumidor.