El secretario de Relaciones Exteriores, Luis Videgaray Caso, confió en que el gobierno de Israel rectifique las declaraciones de su primer ministro, Benjamín Netanyahu, referentes a la construcción de un muro en la frontera entre México y Estados Unidos.

 

Recordó que México ha tenido muchos gestos de amistad con la comunidad judía mexicana y con el pueblo israelí, por lo que “es absolutamente incomprensible que su primer ministro lleve a cabo una expresión de este tipo que consideramos francamente una agresión”.

 

Por ello, en entrevista televisiva con Carlos Loret de Mola, indicó que el gobierno mexicano espera una rectificación acerca de los dichos del funcionario israelí, “nos parece que el primer ministro debe tratar a México como lo que es, como un país amigo (…) y le corresponde al gobierno de Israel clarificar la posición”.

 

El canciller celebró la reacción de la comunidad judía en México que se opuso de manera firme a los señalamientos de Netanyahu. “La posición de la comunidad judía mexicana es clara, es firme, absolutamente coincidente con la del gobierno mexicano, todos somos mexicanos”.

 

Sobre este tema, Videgaray Caso reconoció que hay una profunda diferencia, un rechazo absoluto del gobierno mexicano a la declaración del primer ministro “y esperaros que el gobierno de Israel tenga la sensibilidad para corregir esta posición”.

 

“Estamos esperando que haya una clarificación, rectificación, creo que una disculpa sería algo apropiado en este caso y hasta a hora lo que hemos recibido son distintas expresiones que dicen que no se refería a México”, añadió.

 

Por otra parte, el titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) reiteró que se mantiene el diálogo con Estados Unidos, pese a “las formas diferentes” de su presidente, Donald Trump, ya que ese país es el principal socio comercial de México.

 

En ese sentido aseveró que “la relación sigue siendo muy fluida, hay mucho diálogo, en algunos aspectos la comunicación es, incluso, más fluida que con administraciones anteriores”, por lo que no consideró que la relación atraviese “por un momento malo”.

 

“Lo que sí es que vivimos un momento de mucha tensión, en el momento que México dice no vengo, nos levantamos de la mesa, como lo hicimos el jueves en la mañana, por supuesto que generó sorpresa y tensión”, agregó.

 

No obstante, señaló que la llamada telefónica del viernes pasado entre los presidentes Enrique Peña Nieto y Donald Trump reencausó el diálogo, aunque “los irritantes siguen ahí, las diferencias importantes, evidentes, están todavía y tenemos que encontrar la forma de llegar a acuerdos que sean aceptables para ambas partes”.

 

jram