El camino para el éxito político parece ya no ser el mismo de antes. El ascenso meteórico a la cima del poder que tradicionalmente pasaba por los partidos, aunque también por la academia o a través de la intrincada pirámide de la alta burocracia, está cambiando y podría deparar nuevas sorpresas en el futuro.

 

 

El aprendiz, un popular reality show en el que un grupo de aspirantes compiten por un contrato para dirigir alguna empresa, parece haber hallado la clave del éxito político, pues se convirtió en una verdadera vitrina donde personajes poco conocidos exhiben sus grandes cualidades.
El picaporte del poder está ahora al alcance de los “outsiders”, es decir, de los bisoños en materia política, aunque no necesariamente de cualquiera, sino sólo de quienes reúnen cierto tipo de cualidades como liderazgo, ambición, audacia y proactividad.
Es claro que quienes han escuchado la fatídica frase “you are fired” (estás despedido) tienen que buscar su modo de vida en otro lado.

 

Adrian Brown, director ejecutivo del Centre for Public Impact, en una entrevista con 24 HORAS explica que los programas de televisión como El aprendiz “todavía pueden atraer a grandes audiencias, por lo que ofrecen una gran plataforma para cualquier político que aspire a tener un perfil alto ante la población”.

 

“Por supuesto, la elección de a quién despedir cada semana es mucho más fácil que las decisiones que la mayoría de los políticos enfrentan en el día a día, por lo que la comparación no es justa. Sin embargo, esto no impide que la gente sí haga este tipo de equiparaciones”, indica.

 

Para el experto, los “outsiders” capitalizan con la frustación por lo que ofrecen “nuevas soluciones” a problemas que los gobiernos se muestran incapaces de resolver o cuando no logran beneficiar a los ciudadanos mediante sus políticas, lo que “ocasiona pérdidas de tiempo, dinero y, sobre todo, mina la confianza del público en los líderes y la democracia”.

 

Eso crea la oportunidad para que aparezcan personajes frescos, nuevos, con un perfil distinto.

 

El Centre for Public Impact con sede en Londres publicó un análisis sobre el programa y los personajes que participaron alrededor del mundo y llegó a la conclusión de que “la mejora del impacto público es uno de los mayores desafíos del siglo XXI”.

 

El análisis mostró que la exposición en este programa aumenta 18,000 veces las posibilidades de éxito en la política, lo que supera las ventajas de haber ido a la mejor universidad o tener el respaldo de un político prominente. The apprentice se ha presentado en 29 diferentes países y de 33 de sus presentadores, 12 han conquistado cargos políticos.

 

La investigación muestra que se requieren tres elementos para tener impacto en el gobierno: legitimidad, política y acción a los que Brown llama “los fundamentos del impacto público”.

 

Sobre cómo se explica que los participantes en este reality puedan tener éxito afirma que “posiblemente los anfitriones de El aprendiz tienen un sesgo fuerte hacia la acción y viniendo de un contexto no tradicional también poseen una clase única de legitimidad” (la de estar excluidos de las adversidades del sistema).

 

Sin embargo, admite que falta todavía por responder la pregunta de si “poseen la experiencia política correcta”.

 

El experto considera que “la situación actual en varios países sugiere que la legitimidad de los políticos, y de los gobiernos más ampliamente, es realmente baja”, lo que explica “la atracción de candidatos procedentes de contextos no tradicionales, como las personalidades de la televisión, así como el surgimiento de partidos que ofrecen plataformas políticas más populistas”.

 

El Centro de Impacto Público, una organización sin fines de lucro financiada por The Boston Consulting Group, estudia actualmente las razones de la baja legitimidad de los políticos y qué significa para los gobiernos así como la forma en que éstos pueden “responder positivamente”.

 

Ahora falta por saber si personajes al estilo Donald Trump –quien dirigió el programa 14 temporadas– podrán realizar realmente una larga carrera política o tendrán un éxito fugaz, algo que deberá ser investigado en forma “más profunda”, según Brown, quien posee más de 15 años de experiencia en transformación del gobierno tanto en Reino Unido como internacionalmente.

 

En todo caso, considera que “cuando los ‘forasteros’ entran al gobierno “a menudo no entienden completamente la cultura única del sector público, y por lo tanto luchan para lograr el impacto que esperan”.

 

“Eso puede ser frustrante y terminan saliendo con bastante rapidez. Sin embargo, si son lo suficientemente audaces y experimentados, para cambiar la cultura del gobierno, entonces podría ser el caso de que su impacto es más profundo y duradero”, expone.

 

Por ello, los resultados podrían ser más bien binarios: “O se desvanecen rápidamente o se establecen como jugadores dominantes”, señala.

 

El éxito de esta nueva generación de líderes podría ser efímero, en la medida en que fracasen o no logren el éxito que exigen las sociedades en distintos países, siempre en busca de mejores dirigentes. Trump podría ser una clave para el futuro en esta materia.

 

 

Para consultar el análisis:

https://www.centreforpublicimpact.org/the-apprentice-phenomenon/