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El presidente Enrique Peña Nieto enviará al Congreso de la Unión una iniciativa prefente para reformar la Ley General de Educación que permita la revalidación de estudios a los mexicanos que, eventualmente, sean deportados de Estados Unidos.

 

Previamente, la Secretaría de Educación Pública (SEP) anunció que “la prioridad es otorgar facilidades para al ingreso de los beneficiarios, sin importar su condición migratoria o los documentos con los que cuenten, con el apoyo coordinado de las autoridades educativas locales, así como de las instituciones públicas y privadas que conforman el Servicio Educativo Nacional”.

 

Entre las medidas de dicha reforma está la simplificación de requisitos por lo que los migrantes que hayan estudiado en la Unión Americana ya no tendrán que presentar la apostilla de los documentos de identidad y académicos sino una carta bajo el juramento de decir la verdad.

 

La segunda acción es la simplificación de la revalidación de estudios, pues ahora una institución académica podrá hacerlo con su simple opinión técnica.