Es habitual ver en las gradas del Madison Square Garden a Charles Oakley, ex estrella de la NBA, quien se mantuvo 10 años en la franquicia neoyorquina y ahora gusta de apreciar los juegos de los Knicks muy cerca de la duela, pero en el encuentro ante los Clippers las cosas dieron un giro inesperado.
Cerca del final del primer cuarto, agentes de seguridad del recinto retiraron a Oakley de su asiento y lo expulsaron del lugar. En un pasillo trasero, el ex atleta de 53 años de edad terminó arrestado, rodeado de al menos 12 guardias y con Phil Jackson, presidente de los Knicks, intentando calmarlo.
“Más de una docena de guardias, empleados y policías de Nueva York atestiguaron su comportamiento abusivo… Todo lo que él ha dicho desde el incidente es mentira”, se lee en la declaración oficial que los Knicks publicaron.
Por su parte, Oakley ofreció una entrevista y declaró que considera su detención como una falta de respeto, ya que “los guardias recibieron órdenes de alguien, me vigilaron todo el tiempo… si más de 2 o 3 personas se acercan a ti te sientes amenazado”.
El también ex jugador de los Bulls enfrenta tres cargos de delitos menores y uno más por atacar a un guardia de la casa de los Knicks.
Frase
“No me agrada el dueño (James Dolan), pero soy un fan de los Knicks y los seguiré apoyando fuera o dentro del Madison Square Garden”, Charles Oakley