La monumental estatua ecuestre de Carlos IV, mejor conocida como de El Caballito, diseñada por el escultor y arquitecto de origen español Manuel Tolsá (1757-1816), estará recuperada plenamente el próximo verano, adelantó el director del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), Diego Prieto.
Tras la presentación de las acciones de trabajo de la institución a su cargo para este 2017, el también antropólogo comentó que, a más tardar en junio, la escultura (que fue dañada en 2013 por una mala acción de mantenimiento) verá de nuevo la luz.
Símbolo de identidad y referencia de la memoria colectiva, situada en la Plaza Tolsá, a un costado del Museo Nacional de Arte (MUNAL), la obra tuvo daños irremediables en un 35% de su estructura, luego de que un equipo de trabajadores del Fideicomiso del Centro Histórico del Gobierno del Distrito Federal emprendiera trabajos de limpieza; por los daños, la entonces Contraloría General del Distrito Federal sancionó a cuatro funcionarios menores por el caso.
A cuatro años del incidente que la dañó, un equipo de expertos del INAH, a cargo de Liliana Giourguli Chávez, coordinadora nacional de Conservación del Patrimonio Cultural, trabaja para que en cuatro meses más la monumental escultura por fin se vuelva a exhibir al público.