JERUSALÉN. El primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, confirmó hoy la celebración hace casi un año de una cumbre secreta con Estados Unidos, Egipto y Jordania para abordar un acuerdo de paz regional, como ha desvelado el diario “Haaretz”.
Según el periódico, el mandatario israelí aseguró hoy ante los ministros de su partido Likud que fue uno de los promotores del encuentro organizado en la ciudad jordana de Aqaba y en el que el entonces secretario de Estado de EU, John Kerry, ofreció a Israel un acuerdo regional que Netanyahu finalmente rechazó.
La propuesta incluía el reconocimiento de Israel como Estado judío y la reanudación de las negociaciones de paz con los palestinos con el apoyo de los países árabes.
“La historia definitivamente juzgará tanto la dimensión de la oportunidad como de la oportunidad perdida”, afirmó hoy en su cuenta de la red social Twitter el líder del Partido Laborista, Isaac Herzog, conocedor de la cumbre pocos días antes de que tuviera lugar a principios de marzo de 2016.
El diputado del procolono Hogar Judío Bezalel Smotrich se manifestó en las redes sociales, en defensa del rechazo al acuerdo: “Seguiremos salvaguardando el Estado de Israel y el sionismo y evitaremos entrar en aventuras”.
La parlamentaria de la formación pacifista Meretz Michal Rozin calificó al primer ministro de “mago” y le acusó de “continuar con sus malabares”.
“Sí a un Estado palestino, no a un Estado palestino; no a una iniciativa de paz regional, sí a una iniciativa de paz regional. Lo que sea por sus intereses políticos”, valoró.
Ex altos funcionarios de la entonces Administración de Barack Obama revelaron al diario israelí, bajo condición de anonimato, los detalles de la cumbre secreta, a la que asistieron el presidente de Egipto, Abdelfatah Al Sisi, y el rey Abdalá II de Jordania.
Netanyahu no aceptó los términos del acuerdo propuesto por Kerry con el argumento de que no sería aceptado por sus socios de Gobierno, de tendencia ultranacionalista y defensores de la anexión de Cisjordania.
El rotativo informó de que el primer ministro intentó un reajuste en el Ejecutivo para incorporar al partido de centro-izquierda Unión Sionista, pero los contactos no prosperaron.
La cumbre se programó después del fracaso de las negociaciones israelo-palestinas de 2014 y del histórico acuerdo con Irán sobre su programa nuclear.
jr