El presidente municipal de Cuernavaca, Morelos, Cuauhtémoc Blanco defendió a su secretario del Ayuntamiento, Guillermo Arroyo Cruz, ex abogado de los hermanos Pineda Villa –Alberto, Mario y Salomón–, quienes eran acusados de estar vinculados al crimen organizado, y además son cuñados del exalcalde de Iguala, José Luis Abarca.
Según el ex futbolista quien “tampoco se ha robado un peso”, es su tesorero José Alejandro Villarreal, quien en meses pasados, fue denunciado por por obligar a una persona a depositar 160 mil pesos mensuales, para ocho personas, entre las que se encuentra la mamá del ex futbolista.
Desde la Cámara de Diputados, Cuauhtémoc Blanco aseguró que Guillermo Arroyo, quien se desempeñó como subprocurador contra la delincuencia organizada en la entonces Procuraduría de Morelos, no tiene nexos con Los Abarca (presuntos responsables de la desaparición de los 43 normalistas).
Según la versión del ex empleado del ayuntamiento, los depósitos se hicieron en efectivo con recursos recaudados por el municipio, y bajo las instrucciones del tesorero, José Alejandro Villarreal.
Por determinación de la Auditoría Superior de la Federación-, Alejandro Villarreal Gasca tiene que resarcir un daño al gobierno estatal por 19.3 millones de pesos, tras su paso como secretario de Finanzas y Planeación en las administraciones panistas de los exgobernadores Sergio Estrada Cajigal (2000-2006) y Marco Adame Castillo (2006-2012).
En enero de 2013 ingresó al Congreso del Estado un juicio de procedencia contra Villarreal Gasca, por supuestas irregularidades en la administración de recursos por más de 3 mil millones de pesos.
Esto, luego de las revisiones y auditorías aplicadas por la Auditoría Superior de la Federación, la Secretaría de la Función Pública y la Secretaría de la Contraloría estatal, a los ejercicios fiscales de 2009 a 2011; sin embargo, a finales de marzo la Junta Política y de Gobierno lo declaró improcedente.
Cuauthémoc Blanco señaló que no permitirá intentos para manipularlo ni aceptará el regreso del Mando Único a la ciudad, pues esta instancia no ha reducido de manera visible los niveles de inseguridad que se viven.
Aseguró que tres alcaldes en Morelos se han opuesto a las imposiciones del gobernador Graco Ramírez, por lo tanto sufren todos los días presiones. “Me gusta trabajar, hacer bien las cosas y hablar de frente, por esta razón no toleraré ninguna imposición del gobernador y continuaré trabajando para que se respete la autonomía municipal”.
Las preguntas incómodas las respondió el presidente nacional del Partido Encuentro Social (PES), Hugo Flores Cervantes.