WASHINGTON. El portavoz de la Casa Blanca, Sean Spicer, sugirió que el presidente de EU, Donald Trump, no prevé firmar hoy la versión revisada de su polémico veto migratorio a refugiados y ciudadanos de países de mayoría musulmana, como habían anticipado altos funcionarios del Gobierno a varios medios.
“No estamos ahí todavía”, dijo Spicer a los periodistas en un encuentro sin cámaras, al rechazar la idea de un anuncio por parte de la Casa Blanca de una firma inminente de ese nuevo veto.
El portavoz no quiso aventurarse ni siquiera a confirmar si la nueva orden ejecutiva de Trump al respecto, cuya firma se ha retrasado ya en varias ocasiones, será emitida esta semana.
Fuentes gubernamentales habían adelantado bajo anonimato en los últimos días a varios medios, entre ellos The Wall Street Journal, Politico o The Washington Post, que Trump iba a firmar esa nueva orden hoy.
Con su primer veto migratorio, emitido el pasado 27 de enero, Trump prohibió la entrada al país de los ciudadanos de siete países de mayoría musulmana (Irak, Irán, Somalia, Yemen, Libia, Siria y Sudán) durante 90 días y suspendió el programa de acogida de refugiados durante 120 o, en el caso de los sirios, de manera indefinida.
Tras una semana de caos y confusión durante la cual el Gobierno ya introdujo algunas modificaciones, un juez suspendió el veto de forma temporal para estudiar su constitucionalidad, una decisión que luego mantuvo un tribunal de apelaciones al que Trump había recurrido.
La nueva orden que prepara Trump excluirá, a diferencia del primero, a los ciudadanos de los países afectados que tengan residencia permanente en Estados Unidos o a los que ya estén en posesión de un visado, de acuerdo con lo filtrado por fuentes anónimas a varios medios.
Además, es posible que Irak salga de la lista de países afectados en la nueva orden, en reconocimiento a su papel en la lucha contra el grupo yihadista Estado Islámico (EI), y que se incluya a los ciudadanos de otras naciones no recogidas en el primer decreto, según esas fuentes.
JMS