Después de 17 años y nueve películas en las que dio vida a uno de los superhéroes más icónicos de Marvel, el actor australiano Hugh Jackman dejará de interpretarlo en Logan Wolverine, cinta dirigida por James Mangold que ha cautivado a la crítica en Estados Unidos incluso antes de su estreno, tanto que tiene un porcentaje de aceptación de 93% en el sitio Rotten Tomatoes.

 
Jackman le aportó por primera vez su energía al famoso mutante en el año 2000, en la película original X-Men, del director Bryan Singer, con la que dieron inicio los grandes éxitos taquilleros contemporáneos basados en tiras cómicas. Para esta entrega, el actor quería la oportunidad de crear algo especial para poner fin a su antiguo alter ego en pantalla, como comenta en las notas de producción del filme.

 
“Queríamos algo que se sintiera muy distinto, muy fresco y, a final de cuentas, muy humano”, comenta Jackman, “porque me parece que la fuerza de los X-Men y la fuerza de Wolverine tiene que ver más con su humanidad que con sus superpoderes. Al explorar este personaje por última vez, quería llegar a la esencia de quién era ese humano, en vez de ver lo que ahora puedan hacer sus garras”.

 
En la historia de Logan, éste tiene que cuidar de un debilitado Charles Xavier (Patrick Stewart) en una fundidora derruida, que se encuentra a orillas de un campo petrolífero abandonado. Pero las cosas cambian cuando se convierte en el protector de una niña, Laura (Dafne Keen), quien tiene poderes muy parecidos a los suyos: de sus manos, así como de sus pies, le brotan las mismas garras de adamantio que Wolverine.

 
“Logan no quiere ayudar. En lo absoluto”, comenta Jackman. “No quiere tener nada que ver con eso. Ya tiene mucho tiempo que pasó por esa etapa en su vida en la que reaccionaba ante las peticiones y llantos de la gente que buscaba su ayuda. En esencia, ha llegado a la conclusión que cuando ayuda, por lo general, las cosas terminan peor. La gente que estima termina siendo lastimada; si se apega demasiado, o hace un gran esfuerzo, termina en dolor, pérdida y destrucción”.

 
Pero Jackman tuvo palabras especialmente amables para su joven coestrella Dafne Keen, quien hace su debut cinematográfico en el filme. “Es una actriz fenomenal y es un honor compartir la pantalla con ella”, comenta. “Laura, desde un punto de vista genético, tiene el DNA de Wolverine, así que existen elementos de él en su personalidad y su carácter físico, y eso no es fácil de conseguir. Me pareció muy difícil de lograr cuando yo tenía 30 años, ahora imagínate a una niña de 11, sin ser para nada así en la vida real.

 

Es muy alegre, vivaz y vigorosa. Interpretar a este mutante que está de malas constantemente y lleno de ira, que te puede arrancar la cabeza con tan sólo mirarla de reojo, no podría estar más alejado a como es ella en realidad, y lo consiguió de manera notable”, aseveró.

 
Finalmente, Jackman analiza cómo ha sido el personaje al que ha interpretado durante tantos años: “Wolverine quizá sea uno de los personajes más sombríos y complejos en el universo de las tiras cómicas. Hubo un momento en el que acepté el hecho de que esta iba a ser mi última película”, dice el actor.

 
“Amo este personaje, y ha sido maravilloso conmigo. Te mentiría si te dijera que hubiera estado todo bien si no hubiera sentido que dejamos todo sobre la mesa. Todos los días, cada escena, era una especie de batalla para obtener lo mejor de ese personaje, para obtener lo mejor de mí. Había un elemento de vida y muerte al respecto. Sé que suena dramático, pero así fue como se sintió”, concluyó.

 

Wolverine en el cine

 

X-Men (2000)

 

X-Men 2 (2003)

 

X-Men: la batalla final (2006)

 

X-Men: primera generación (2011)

 

Wolverine inmortal (2013)

 

X-Men: días del futuro pasado (2014)

 

X-Men: apocalipsis (2016)

 

Logan (2017)