WASHINGTON. El presidente Donald Trump dijo esta noche que el procurador Jeff Sessions es blanco de una “cacería de brujas” por los demócratas que piden su renuncia por presunto perjurio cometido en sus contactos con Rusia.
“Jeff Sessions es un hombre honesto. No dijo nada mal. Pudo haber dado una respuesta más exacta, pero claramente no fue intencional”, señaló Trump en un breve comunicado.
Trump sugirió que las acciones de los demócratas vienen del resentimiento de haber perdido las elecciones presidenciales del 8 de noviembre.
“La verdadera historia son las filtraciones ilegales de información clasificada y de otro tipo. Es toda una cacería de brujas”, remató.
Sessions rechazó esta tarde de presidir cualquier investigación que su oficina pueda conducir en torno a los contactos entre personal del equipo de campaña de Trump y funcionarios del gobierno de Rusia.
“He decidido recusarme de cualquier investigación existente o futura de cualquier asunto relacionado de alguna manera con las campañas para el Presidente de los Estados Unidos”, anunció Sessions en una imprevista conferencia de prensa.
Sessions negó haberse reunido con “operadores” rusos para celebrar discusiones sobre la campaña de Trump y defendió como “honesto y correcto” su testimonio ante el Senado pese a haber omitido mencionar los dos encuentros con el embajador de Rusia, Sergey Kislyak.
Trump salió así al paso de la decisión de los líderes demócrata en el Senado y la Cámara de Representantes, Charles Schumer y Nancy Pelosi, respectivamente, de pedir la renuncia Sessions.
“Recusarse es lo de menos, pero esto va más allá… Debido a que el Departamento de Justicia debe estar por encima de cualquier reproche, por el bien del país, el procurador general debe renunciar”, sostuvo Schumer.
Esta posición fue compartida por Pelosi. “Jeff Sessions mintió bajo juramento durante su confirmación ante el Senado. No es apto para ser el principal policía del país y debe renunciar”, apuntó la lideresa demócrata.
JMS