KUALA LUMPUR.  El gobierno malayo declaró hoy persona non grata al embajador de Corea del Norte en Kuala Lumpur, Kang Chol, y le dio 48 horas para salir del país, en medio de una controversia por el caso del asesinato del hermanastro del gobernante norcoreano Kim Jong Un.

 

La expulsión del diplomático indica el nivel que ha alcanzado la tensión suscitada entre los dos países a raíz de la muerte de Kim Jong Nam, quien según investigaciones fue blanco de un ataque con un agente químico por parte de dos mujeres en el aeropuerto internacional de Kuala Lumpur, el mes pasado.

 

El ministro de Relaciones Exteriores de Malasia, Datuk Anifah Aman, informó la noche de este sábado de la expulsión de Kang, quien había sido convocado a la sede de la cancillería para pedir explicaciones sobre sus declaraciones en el caso.

 

Sin embargo, el representante norcoreano “no pudo estar presente”, por lo que el Ministerio de Relaciones Exteriores envió al gobierno de Corea del Norte una nota diplomática para informarle que Kang fue declarado persona non grata y que debía salir de Malasia.

 

“Se espera que (el embajador norcoreano) abandone Malasia dentro de las 48 horas siguientes a la hora en que estaba programada la reunión, es decir a partir de las 18:00 horas locales (10:00 GMT) de este 4 de marzo de 2017”, precisó Anifah Aman en un comunicado.

 

Afirmó que debería quedar claro que Malasia reaccionará fuerte ante cualquier insulto que sea formulado en su contra o frente a todo intento de empañar su reputación, de acuerdo con un despacho de la agencia nacional de noticias Bernama.

 

El canciller recordó que recientemente Kang declaró que el gobierno de Malasia ocultaba algo sobre el fallecimiento de Kim Jong-nam y que había actuado en connivencia con poderes externos para difamar a Corea del Norte.

 

Incluso se refirió a la liberación, la víspera, del norcoreano Ri Jong-chol, el único de los ocho sospechosos vinculados al asesinato de Kim que ha sido detenido, por falta de pruebas para acusarlo formalmente.

 

Ello demuestra que la policía malaya llevó a cabo “una investigación imparcial, justa y transparente, como corresponde a un país que practica el Estado de Derecho”, enfatizó el funcionario.

 

La expulsión del diplomático norcoreano siguió a la decisión del gobierno de Malasia de exigir visado a los ciudadanos de Corea del Norte para entrar al país a partir del próximo lunes.

 

El canciller malayo reiteró nuevamente que Pyongyang debe ofrecer una disculpa por escrito a Kuala Lumpur por las acusaciones que el embajador Kang ha pronunciado en su contra, como lo exigió hace cuatro días, sin que hasta ahora el liderazgo norcoreano se haya pronunciado al respecto.

 

Kim Jong-nam murió el 13 de febrero pasado, cuando debía abordar un vuelo en el aeropuerto internacional de Kuala Lumpur, donde fue atacado por dos mujeres que le pusieron un paño en el rostro y minutos después sufrió un ataque al corazón provocado por un agente nervioso llamado VX.

 

JMS