El Congreso de Nuevo León rechazó las cuentas públicas de Jaime Rodríguez Calderón El Bronco cuando era alcalde de García y en su primer año como gobernador de la entidad, como parte de la revisión que hicieron los diputados locales de los estados financieros.
En total, fueron analizadas 322 carpetas con balances financieros de estado y municipios, de las cuales 242 fueron aprobadas, 58 rechazadas y 22 dejadas en reserva.
Los legisladores basaron su decisión al escándalo de precio inflado de miles de cobertores repartidos en la zona rural, caso conocido como Cobijagate, que ocurrió a principios de la gestión del mandatario local.
Tras el caso, el jefe de adquisiciones del estado, Rogelio Benavides Pintos, renunció sin que fuera denunciado penalmente.
La congresista del PRI, Gloria Treviño, explicó que no hay una cuantificación precisa del daño al erario, pues la información se encuentra en reserva por la Contraloría estatal.
Además, a Rodríguez Calderón también le negaron la cuenta de su gestión como alcalde en el municipio conurbado de García en el 2012, debido a que presentaba por lo menos unas 10 observaciones de la Auditoría Superior del Estado, explicó el panista Guillermo Rodríguez.
Durante la revisión de los estados financieros, el Congreso local también rechazó la cuenta pública de Margarita Arellanes en el 2015, y de los últimos nueve meses de gestión del ex gobernador Roberto Medina de la Cruz. (Con información de Proceso)
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