El presidente estadunidense Donald Trump pedirá mil 500 millones de dólares en el presupuesto especial de este año para la construcción del muro en la frontera con México, recursos que forman parte de la partida general de 30 mil millones en defensa y seguridad nacional.
Adicionalmente la administración Trump solicitará al Congreso dos mil 600 millones de dólares para la construcción del muro dentro del presupuesto regular del año fiscal 2018.
“¿Cuántas millas de muro se construirán con eso? No tenemos una respuesta porque no hemos llegado a una conclusión sobre el tipo de construcción, no hemos decidido donde vamos a empezar”, dijo el director de presupuesto de la Casa Blanca, Mick Mulvaney.
En la campaña electoral y en sus primeros días como presidente electo, Trump dijo que el muro sería pagado por México, pero según la información los recursos vendrán del Departamento del Tesoro y su objetivo es financiar la construcción de proyectos “piloto” de muro, con diferentes diseños en varias áreas de la línea limítrofe.
Se trata de una solicitud por debajo del costo estimado general de entre 13 mil a 21 mil millones de dólares.
Esta petición presupuestal debe ser aprobada por el Congreso, donde el proyecto ha enfrentando críticas no sólo de demócratas, sino también de senadores republicanos como John McCain y John Cornyn.
El pasado lunes el liderazgo de la minoría demócrata del Senado amenazó a la mayoría republicana con paralizar el gobierno federal si colocan el presupuesto para el muro con México, deportaciones y otras “píldoras venenosas” en la ley de gastos.
En una carta dirigida al líder republicano Mitch McConnell, su homólogo del Senado, Charles Schumer, dejó en claro que si se incluyen esos temas no tendrán los votos que requieren de la oposición para mantener abierto el gobierno después del 28 de abril.
“Si los republicanos insisten en insertar píldoras venenosas tales como el financiamiento Planned Parenthood, construir un muro fronterizo o poner en marcha una fuerza de deportación, estarán paralizando al gobierno y dándole un duro golpe a la economía”, señaló Schumer.
La aprobación de la ley de gastos requiere 60 de los 100 votos del Senado. Los republicanos cuentan con 52 escaños, por lo que requieren el apoyo de al menos ocho votos demócratas.
Si no se logra un acuerdo entre republicanos y demócratas, el gobierno federal quedaría paralizado, toda vez que por el momento sólo cuenta con un presupuesto de emergencia que mantiene los gastos al nivel del año fiscal 2016.
La semana pasada el líder de los republicanos en el Senado, Mitch McConnell echó un balde de agua fría a la idea del presidente Donald Trump de que México pague el muro.
“No”, respondió concisamente el líder de la mayoría conservadora a la pregunta de si México pagaría la factura del muro durante un foro organizado por la publicación Político.
La administración Trump tampoco ha detallado como planea utilizar el principio de “dominio eminente”, para adquirir los terrenos privados donde sería elevado el muro.
Algunos terratenientes de estados como Texas así como tribus nativas del estado de Arizona, han expresado su oposición a la venta de sus tierras para el muro fronterizo.
jram